De padres guineanos y origen francés, un joven de 23 años, de más de metro noventa, que fue rechazado por Sir Alex Ferguson -entrenador durante 33 años del Manchester United- y vistas sus redes sociales, el fútbol no parece su prioridad, hasta sus variaciones de posición en el terreno de juego podrían ser una temeridad para cualquier entrenador.
Pero Pogba es la excepción que rompe la regla, el gigante que domina el balón como los pequeños diablos y el centrocampista que ocupa los espacios en una Juventus necesitada de él. La extravagancia personificada. Cómo viste, cómo se peina, cómo piensa, cómo se mueve, cómo juega hasta cómo celebra, resulta extraño para el aficionado de a pie. Tiene potencial para dominarlo todo sobre el campo. Espacios con y sin balón, conducciones y disparos. Capacidad para recuperar, elasticidad para estirar y una portentosa calidad para abrillantar todo lo ya comentado.
Pogba parece estar preparado para otra época, no tan lejana pero de momento no cercana. Con sus dotes y cualidades, un barullo es una salida al paso y un balón en la frontal, un gol casi cantado. Se ha erigido como uno de los líderes de la Juventus en el año de su reconstrucción y de la selección francesa, en el año de su Eurocopa. Y recuerden, con tan solo 23 años.
Con la marcha de Pirlo, Tévez y Vidal, el francés se le encomendaba un papel que pareció venirle grande; portar la 10 y liderar a la Juventus en el segundo año de Allegri tras casi rozar el triplete. Nada fácil de inicio. Los rumores sobre su marcha que le habían afectado durante gran parte del verano unido a estos objetivos, parecieron desconectar a Pogba del juego. Unido al mal inicio de la Juventus -llegó a estar a 12 puntos del líder- el conjunto de Allegri se levanto allá por el mes de Agosto con el pie izquierdo y no despertó hasta Octubre, con Pogba ya asentado.
*Hasta mediados de Octubre, Pogba había anotado 1 gol y 2 asistencias
Desde entonces hasta la fecha, ya con el Scudetto en la vitrina, la Juventus ha sumado 76 puntos de los últimos 78 en juego. Y los números de Pogba han mejorado de forma simultánea. Funcionó la conexión, no importaba si unos días con Dybala u otros con Mandzukic. Ahora era la camiseta quien le quedaba ajustada. En los últimos 8 partidos, el dato es revelador. Pogba ha participado en todos los partidos que ha jugado la Juventus, pues bien le ha servido al conjunto de Turín para ser campeón. Un total de 4 goles y 7 asistencias en el tramo final de la competición, para alzarse como el máximo asistente de la Serie A con 12 asistencias. Resulta extraño y complicado de entender, pero solo tienes que verlo un par de minutos para saber el jugador que es. Un extravagante ambicioso, que no conoce ni el freno ni el límite, a sus 23 años, ha conquistado 4 Scudettos consecutivos y solo tiene en mente una frontera, el éxito. Y se acerca a pasos agigantados.
Últimos partidos de Paul Pogba con la Juventus (4 gols y 7 asistencias) WhoScored
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