El Sevilla es el segundo mejor equipo de la Liga española y el domingo incluso fue líder durante algunas horas, pero se mantiene arriba con un fútbol alejado de lo que defiende su técnico, Jorge Sampaoli, quien sólo manifiesta entusiasmo con el compromiso mostrado por sus futbolistas.
Este Sevilla va en serio, como sugirió el domingo con su victoria por 1-0 ante el Atlético de Madrid, un equipo que precisamente en el Sánchez Pizjuán perdió su condición de invicto durante esta temporada.
La jugada del gol del triunfo reflejó lo que es el Sevilla actualmente. Todo nació de un saque de banda en campo propio y finalizó con un mano a mano resuelto con agonía por Steven N’Zonzi después de una jugada forjada en sólo tres pases. Muy lejos de la filosofía que propugna el entrenador del Sevilla, amante de masticar el juego y someter desde la posesión del balón.
Sampaoli llegó a un club que tiene en el recuerdo a Carlos Bilardo, entrenador del Sevilla en las temporadas 1992-93 y 1997-98. «Es un gran entrenador, aunque yo no concuerde con su estilo«, reconoció en su presentación.
Lo que el nuevo técnico del Sevilla pretende es «transmitir una idea», asociada ésta a la corriente «menottista». O si se quiere, y más contemporáneamente, al bando «bielsista». Es decir, cosas como presión sin desmayo en campo rival, dominio de la pelota, fútbol asociativo, ataques por todas las zonas del campo… Pero la realidad es que nada de esto está sucediendo.
¿Resultados o filosofía? | Getty
Así lo reconoció el propio Sampaoli tras el triunfo ante el Atlético de Madrid, cuando dijo en relación a la posibilidad de competir contra los más grandes: «Tenemos que buscar una identidad, que haga que nos identifiquemos con la gente y ojalá estemos a la altura de esos equipos«.
Para ello, insistió en «no tener temores, no estar a la espera, tener protagonismo y buscar más el arco rival que el propio, que haya más jugadores del Sevilla que del rival en campo contrario«.
Además, expresó una confianza plena en el futuro en un mensaje que al tiempo escondía cierto desencanto por lo mostrado hasta entonces: «Con el paso del tiempo, este equipo será muy grande».
Si la idea es por el momento inconclusa, no lo son los resultados. Es líder del Grupo H de la Liga de Campeones junto a la Juventus y marcha segundo en la Liga española después de superar al que el propio Sampaoli calificó como «el mejor equipo del mundo» actualmente.
«El planteamiento práctico de Sampaoli hizo mejores a los suyos», aseguró hoy «Diario de Sevilla». Y añadió: «El ‘amateurismo’ está muy bien y a todos nos gusta, pero mucho mejor aún es acabar el partido como ganador, aunque sea con un solo gol marcado y no encajar ninguno del rival, algo que ya se viene haciendo habitual en muchas ocasiones a lo largo del curso».
A la espera de que la «idea» fructifique, Sampaoli tiene la tranquilidad de construir desde los resultados. De momento, sólo el Real Madrid los tuvo mejores que su Sevilla. Un punto, concretamente.
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