Ayer, día 10 de julio, se resolvió la final de Wimbledon masculina con otra victoria para Novak Djokovic, la séptima de su carrera y la cuarta de manera consecutiva. Con esta victoria también suma su Grand Slam número 21, uno por encima de Roger Federer y a uno del récord de Rafa Nadal.
Djokovic venció en cuatro sets al australiano Nick Kyrgios (3-1), que ganó el primer set y luego vio como su buen comienzo de volatilizaba en un círculo de rabia y frustración. El monólogo que soltaba tras cada punto perdido -a veces, incluso ganando el punto- hizo que fuera perdiendo la concentración y la confianza en sí mismo hasta un punto de no retorno. Mientras, ‘Nole’ continuaba enfocado en ganar el partido. Pese a todo, Kyrgios firmó un espectacular torneo, llegando a una final de GS por primera vez en su carrera. El actual número 45 del mundo pisará más escenarios como este, seguro.
Por su parte, Djokovic continúa su persecución a Nadal y ya está a tan solo un título de empatar su récord. El ex número 1 también se mostró muy amigable con su rival al acabar el partido con frases como «es el comienzo de una bonita relación». Esto debido a polémicas pasadas que hubo entre ellos hasta que el australiano apoyó a Djokovic públicamente con el tema de su veto en ciertos torneos por no estar vacunado contra el Covid-19, un gesto que ‘Nole’ valoró.