La cantidad de emociones que se pueden vivir en un mismo partido es increíble. Expertos matemáticos afirman que es un número más difícil de calcular que Pi. Pero lo que se siente viendo los resultados de los partidos de este fin de semana es desconcierto. Si bien siempre hay sorpresas, esta primera jornada del mes de febrero fue cuanto menos desconcertante
Seguramente el fin de semana comenzó con la sorpresa más grande: la derrota del Arsenal en casa del Everton. Los ‘toffees’ se encuentran en puestos de descenso y la visita del Arsenal suponía el primer partido de su nuevo entrenador, Sean Dyche. El clima turbulento alrededor del equipo no ayudaba a la hora de pensar en una posible victoria contra casi ningún equipo, menos todavía contra el líder de la Premier League, que solo había perdido un partido en lo que va de liga. Pues sucedió. Un tanto de Tarkowski le dio los tres puntos al Everton y sumó la segunda derrota en Premier esta temporada para Arteta.
Si bien el Liverpool no está en su mejor momento, también fue una sorpresa que los Wolves le metiesen un 3-0. Los de Lopetegui, otro equipo que coquetea con la zona baja de la tabla y que logró vencer a un frágil Liverpool, sí, pero el Liverpool a fin de cuentas. Un par de horas después, el Newcastle (4º en liga) empató en casa contra el West Ham (16º).
Al mismo tiempo, en España, el Elche lograba su primera victoria de la temporada en liga. Sí, la primera, en la jornada 20. El Villarreal sufrió la ira de Pere Milla que, con un hat-trick, logró sumar de a tres para su equipo. Siguen hundidos en la parte baja de la tabla, pero este podría ser un punto de inflexión sobre el que empezar a trabajar una mejor segunda vuelta. Tras la victoria están a 11 puntos de la salvación. El Getafe, otro equipo en descenso, también logró sumar. Empató 1-1 en casa del Atlético de Madrid, otro resultado que no esperábamos. La imagen curiosa del partido fue la de Ángel Correa celebrando su gol desde el banquillo, pues fue sustituido al mismo tiempo que el tanto era revisado por el VAR. El sábado en España lo cerró la victoria del Celta en casa del Betis por 3-4, partidazo en el Benito Villamarín. El Celta, otro equipo que está sudando sangre para sumar puntos, logró alejarse un poco de la quema en uno de los mejores partidos de lo que va de liga, no solo suyo, en general, sobre todo para el espectador neutral.
Todo eso el sábado, pero el domingo no se quedó atrás en materia de resultados inesperados. La derrota del Arsenal le daba la oportunidad de recortar puntos al Manchester City en su persecución liguera. Con el objetivo puesto en ello visitaron el Tottenham Hotspur Stadium, pero se tuvieron que marchar de vacío. No pudieron ni siquiera rascar el empate ante un Tottenham férreo en defensa que aprovechó un error en salida de balón de Rodri para anotar el único gol del partido. El Arsenal sigue a cinco puntos con un partido menos.
En España el día empezó fuerte: el Madrid perdía en Mallorca. Un encuentro bastante marcado por polémicas extradeportivas alrededor de Vinicius y contra el dúo Raíllo-Maffeo. En lo deportivo, Un autogol de Nacho y un penalti fallado por Asensio -y parado por Rajkovic- fueron las claves del 1-0. Duro golpe de cara a la persecución del Madrid al Barcelona, que jugaba más tarde y podía ponerse a 8 puntos de distancia. Spoiler: lo hizo, el Sevilla no dio la sorpresa. Por último, el Valladolid logró los tres puntos en el Reale Arena, un templo del que pocos habían logrado rascar puntos. También fue por la mínima, un solitario gol del reciente fichaje Cyle Larin, que se erige como héroe en Pucela. Gol en el 90’ para el 1-0 vs Valencia y gol en el 73’ para el 0-1 vs Real Sociedad. Ambos entrando desde el banquillo, lo que se traduce en dos goles en 47 minutos con la camiseta blanquivioleta.
El fútbol es impredecible, no nos cansamos de repetirlo. Aun así, tales resultados son merecedores de un artículo y, como mínimo, una efeméride en el calendario. Por más fines de semana como estos, partidos de los que ponen interesantes las mini peleas dentro de cada liga.
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