En el fútbol moderno se requieren futbolistas diferentes, jugadores que tengan cualidades para desarrollarse y desenvolverse satisfactoriamente en las distintas situaciones que se presentan en la cancha. Tipos que no tengan problema en ensuciarse, que con el cuchillo entre los dientes puedan recuperar un balón en el borde del área propia, pero que a su vez no tengan ningún inconveniente en ponerse el traje de gala para tirar un caño o dar una asistencia increíble, ese es el tipo de futbolista que se necesita hoy en día, esos todo terreno que son capaces de comerse el campo en cada partido.
Morgan Sanson es uno de esos jugadores. Aunque a simple vista no lo parezca, el despliegue físico que realiza en cada partido es digno de admirar y aporta satisfactoriamente tanto en la creación como en la recuperación del balón. En poco tiempo se ha convertido en un jugador clave para el Olympique de Marsella, y es que es una alegría verle jugar, un tipo que da todo por la camiseta y que aporta en las dos áreas.
Morgan puede jugar en cualquier parte del medio campo, y desempeñarse de excelente manera jugando ya sea de interior o de ‘5’, y es que da la impresión que puede hacerlo todo. Precisión y ‘timing’ para realizar entradas, calidad y buen pie para salir jugando, suficiente velocidad para no achicarse ante ningún rival y el toque de fuerza necesario para no afectar sus otras cualidades y a su vez lograr ser un dolor de cabeza para los rivales.
Su corta edad (22 años) hacen creer que su proyección es casi imparable. 3 goles y 10 asistencias en esta temporada, hacen ver la facilidad que tiene de cara al arco y lo importancia que tiene en la cancha. Morgan es un deleite, un centro campista completo y seguramente dará mucho de que hablar en los próximos años.