El aniquilador de récords que es Leo Messi anda empeñado en intentar el no va más con una jugada maestra: protagonizar la segunda remontada consecutiva del Barcelona en la Liga de Campeones europea con su gol número 500 como azulgrana.
El astro argentino está a tan sólo dos tantos de alcanzar la suculenta cifra y la ocasión le viene que ni pintada mañana en el Camp Nou: un duelo de cuartos de final de la Champions ante la Juventus de Turín, con un 3-0 en contra.
Ése es el resultado con el que el Barcelona partió la semana pasada de Turín, tras un duelo en el que ni siquiera Messi fue capaz de sobreponer su genialidad al mal juego generalizado de los dirigidos por Luis Enrique.
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«Espero que mañana estén todos en su mejor versión, pero Messi, al 25 por ciento, ya nos aportaría muchísimas cosas», señaló el técnico español del Barcelona.
Acostumbrado a ser decisivo en casi todas las citas de su equipo, el cinco veces Balón de Oro pasó casi desapercibido en los tres últimos partidos europeos del Barcelona, los dos de octavos ante el Paris Saint Germain (PSG) y la ida de cuartos frente a la Juve. Y aunque los azulgrana protagonizaron una épica remontada ante el PSG sin necesidad de que su genio brillara, las dudas siempre son mayores y las cosas, más difíciles, cuando Messi no tiene su día.
Con el 10 argentino apagado, nadie creyó que los de Luis Enrique serían capaces de voltear el 4-0 de la ida frente a los franceses, de sobreponerse luego al provisional 3-1 en el Camp Nou y de acabar firmando un insólito 6-1 que los condujo hasta los cuartos.
De aquellos seis tantos, sólo uno (y de penal) fue de Messi, que ya suma 94 goles en Champions. En la Liga española, suma 341 goles, 43 goles en la Copa del Rey, 12 más en la Supercopa de España, cinco en el Mundial de Clubes y tres en la Supercopa de Europa. Total: 498 goles en 575 partidos oficiales, para un promedio de casi un tanto por partido.
Messi y Suárez liderarán el ataque contra la Juve | LLUIS GENE/AFP/Getty Images
Messi, que casi nunca habla fuera de la cancha, tampoco dijo nada de momento sobre otro de esos récords que trascienden. Hace tiempo que el argentino dejó de preocuparse por las gestas personales. Su sabor será amargo si el Barcelona queda eliminado mañana, por más que él alcance los 500 goles.
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El título continental se apuntaba como el gran objetivo colectivo de los azulgrana esta temporada. Y ningún escaparate es mejor que el europeo para que la estrella argentina reivindique su reinado en el fútbol mundial frente a Cristiano Ronaldo. El astro portugués va camino de las semifinales continentales con el Real Madrid y espera a su archirrival argentino el próximo domingo, en el estadio Santiago Bernabéu, en el clásico de la Liga española.
Messi, además, afronta dos citas decisivas de la temporada después de otro sinsabor con su selección. Los cuatro partidos de sanción por haber insultado a un árbitro pesan sobre la conciencia del 10.
A la espera de una posible rebaja en el severo castigo, nada mejor para aplacar su dolor que clasificar al Barcelona para las semifinales de la Champions con su gol 500, justo antes de batirse en duelo por la Liga con el Real Madrid.