Sergio GARCÍA ARIAS.– El Manchester United cerró recientemente el traspaso de Matteo Darmian (Italia, 1989) por una suma monetaria que ascendió a unos 18 millones de euros. El jugador proviene del Torino y firmó por cuatro años con los red devils.
Canterano del Milan, que percibirá dinero en la operación por sus derechos de formación, Darmian no pudo llegar hasta el primer equipo rossonero por lo que se marchó al Palermo que compartía los derechos del futbolista con el combinado de San Siro y posteriormente, al Padova en la Serie B italiana. En la temporada 2011-12 llegó cedido al Torino, donde tras hacerse con la titularidad en el lateral derecho terminaría siendo fichado por el conjunto de Turín por 1,8 millones de euros. Internacional con la selección italiana en todas las categorías inferiores, Darmian ha tenido ya 13 apariciones con la absoluta incluyendo la titularidad en la fase de grupos del pasado Mundial de Brasil y siendo premiado con el Pallone Azzurro, al mejor jugador de la selección nacional en 2014.
El presidente del Torino (que finalizó noveno en Serie A), Urbano Cairo, introdujo el pesar en sus declaraciones recientes al confirmar que sería complicado retener a Darmian una temporada más en el club con la tentación de jugar en Champions en otro equipo. Cairo marcó el 12 de julio en el calendario como fecha límite para su venta, porque es el día en el que el combinado turinés regresa a los entrenamientos: “Todo aquel que venga a la pretemporada, continuará con nosotros el resto de la campaña. Hemos recibido tres ofertas por Darmian, pero por respeto a los clubes que las hicieron no revelaré sus nombres. Darmian es un futbolista extraordinario que intentará ganar la Champions algún día”. El conjunto de Old Trafford era uno de esos equipos interesados en sus servicios.
Para Matteo, el concepto de fatiga o cansancio no son más que personajes de una novela de Isaac Asimov. Darmian (1,82m de altura y 70kg de peso) es un jugador extraordinariamente polivalente, lo que encaja con la filosofía futbolística de van Gaal y su dinámico y cambiante esquema de juego. Si bien se espera que sea el lateral derecho titular en el supuesto 4-3-3 que espera formar el estratega holandés, Darmian ha demostrado ser capaz de despuntar como volante diestro en un esquema con tres centrales (un dibujo que vimos recurrentemente en los primeros partidos del United la temporada 14-15) ocupando toda la banda e incluso como volante izquierdo con un matiz más ofensivo para recibir el balón a pierna cambiada y golpear con su pierna derecha.
De hecho, es capaz de desenvolverse además como defensa central si el contexto del encuentro lo requiere. Su gran contribución defensiva y dominio del tackling para interceptar aunados con ese dominio físico para subir la banda y crear dificultades a la espalda del extremo rival hacen de Darmian un futbolista muy competente, pieza ideal para iniciar una contra por ese dominio de la intercepción y su capacidad para conducir el cuero y cambiar de ritmo. Además, sus llegadas al área son tan imprevisibles como efectivas ya sea para rematar un centro o para realizarlo. Por ejemplo, frente al Athletic Club en el cruce de Europa League dio una lección sobre esos movimientos que hendieron cual estilete la zaga bilbaína.
Su inserción en el 4-3-3 de van Gaal implementaría los movimientos hacia dentro del Juan Mata ‘falso extremo’ derecho (demarcación que ocupó en los lances finales de la anterior temporada) desocupando un carril que sería eficientemente poblado por las hiperactivas pero racionales subidas y bajadas de Matteo Darmian, futbolista incansable (47 apariciones entre todas las competiciones con el Torino la pasada temporada, más que ningún futbolista del equipo). El carrilero italiano le arrebataría argumentadamente así la titularidad a un Antonio Valencia que desde que llegó a Old Trafford se ha adaptado a todos los planes y entrenadores, haciendo gala de su arquetípico compromiso y derroche físico, que Darmian igualaría e incluso superaría. La perspectiva de un United con dos carrileros del físico y la proyección ofensiva de Shaw y Darmian parece muy atractiva y obligará a sus rivales a abrazar la precaución como religión cuando se enfrenten a los diablos rojos.