Víctor MARTÍN MOLINA – Se abre otra nueva etapa en el Málaga C.F. Bernd Schuster, el tercer entrenador desde que el sheikh Abdullah Al-Thani es propietario del club, no seguirá la próxima temporada en el banquillo de La Rosaleda. El vicepresidente, Moayad Shatat, se lo comunicó ayer mismo tras el entrenamiento. Y hoy, el propio técnico lo ha dejado bien claro en rueda de prensa.
“Todavía no sé los motivos por los que no cuentan conmigo. Con el tiempo nos enteraremos. Si me hubieran propuesto renovar, habría dicho que sí. Hemos dado todas las facilidades, pero ya tenía la sensación de que me marcharía desde hace semanas”. Es parte de lo que ha dicho el alemán en la rueda de prensa previa al intrascendente partido de mañana frente al Levante, que cerrará la temporada.
Lo cierto es que la campaña de Schuster ha pasado por muchos altibajos. Vino con contrato para cinco años –“ahora veo que era mentira”, ha dicho hoy en la misma conferencia ante los periodistas- y una indemnización millonaria por despido que sólo se mantendría vigente mientras el equipo acabase entre los 10 mejores. La derrota por 0-5 ante el Celta supuso la ruptura con la afición. Un divorcio que las formas del alemán no ayudaron a solventar, con algunos gestos hacia la grada que encendieron aún más a la hinchada. Y futbolísticamente, le costó 25 jornadas dar con un estilo y una identidad al equipo.
Sin embargo, el cuadro blanquiazul no ha estado ni una sola jornada en puestos de descenso, y completó partidos de gran mérito en el último tercio de Liga como la goleada al Granada (4-1) o el triunfo ante el Villarreal (2-0). Incluso en la recta final pareció que instalaría en la parte alta de la tabla. Finalmente, todo quedó en una salvación más o menos holgada. Poco botín en comparación con los años de Pellegrini, aunque con una plantilla mucho más modesta.
Con sus luces y sus sombras, lo cierto es que Schuster ya es pasado, aunque se sentará mañana en el banco. Ahora comienza la búsqueda del nuevo técnico y el perfil que quiere el club es claro: cierta juventud, ambición por un proyecto largo y que conozca la Liga. El nombre que más fuerza ha tomado es el de Quique Sánchez Flores, ex de Valencia y Atlético y que ya ha confirmado que vuelve a España tras tres años en Dubai. Por otro lado, apuesta personal de Husillos es el ‘Tata’ Martino. El año pasado ya se tanteó su fichaje, pero la llamada del Barça pudo más. Asegurada su marcha, el Málaga volverá a intentarlo pero su caché ya no es el mismo que en Newell’s. Pepe Mel, que ha dejado el West Bromwich Albion inglés también entra en la lista de candidatos y su fútbol gusta mucho. Igual que Paco Jémez, aunque los 6 millones de cláusula que le fijó el Rayo lo alejan de Martiricos. Esta vez el club quiere moverse muy rápido y dejar resuelto el ocupante del banquillo antes de final de mes para seguir planificando y contar con tiempo en el mercado estival. A falta de euros, la rapidez se antoja vital para reforzar bien la plantilla. El baile no ha hecho más que empezar.
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