El Real Madrid viajará a Múnich para disputar el miércoles la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones ante el Bayern con una honda preocupación en todas sus líneas: desde la portería a la delantera.
Zinedine Zidane tiene motivos para torcer el gesto. Más allá de las críticas que está recibiendo por sus alineaciones y la lectura que hace de los partidos, el técnico del conjunto blanco tiene a su equipo alejado de la forma que quiere. Unas veces, por las lesiones; otras, por el bajo momento de futbolistas en particular.
Ninguna línea del equipo se libra de la preocupación y todo comienza en la portería con Keylor Navas. Los rumores sobre el fichaje de un nuevo portero continúan, aunque el costarricense ofreció el sábado síntomas de mejoría en el duelo ante el Atlético. No deja su puerta a cero desde el 29 de enero.
Con todo, la mayor preocupación de Zidane está en la defensa. Primero se lesionó Raphael Varane y el sábado cayó Pepe, con lo que el conjunto blanco se quedó con apenas dos centrales sanos, como son Sergio Ramos y Nacho Fernández, para un abril que no dará tregua.
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No sólo eso, sino que si Ramos ve una tarjeta amarilla el miércoles, se perderá el encuentro de vuelta ante el Bayern. Y si Nacho Fernández es amonestado el sábado ante el Sporting de Gijón, no podrá jugar el siguiente partido de la Liga española, que será ante el Barcelona.
El brutal choque con Kroos provocó la lesión de Pepe | Gonzalo Arroyo Moreno/Getty Images
Para aumentar el daño, el Real Madrid informó hoy de que el lateral Dani Carvajal no se pudo entrenar con el grupo por unas molestias físicas. En principio no debería ser algo importante, pero la racha de lesiones invita a tomarlo todo con máxima precaución.
En el centro del campo no hay lesionados, pero sí problemas de forma. Y un nombre está en boca de todos: Luka Modric. Clave cuando está en forma, cuando el croata no rinde a su mejor nivel su equipo lo acusa notablemente. Como ahora.
Está perdiendo más balones que antes de la lesión -su acierto en el pase pasó del 91 al 88 por ciento, un descenso notable para un centrocampista por el que pasan prácticamente todas las transiciones- y su nivel físico tampoco es óptimo.
Y, por supuesto, está la delantera conocida como la «BBC«. En tiempos en los que el juego blanco deja mucho que desear, tampoco puede agarrarse a la pegada de sus delanteros.
Bale, inoperante durante el derby contra el Atlético | CURTO DE LA TORRE/AFP/Getty Images
Con 26 goles en 36 partidos, Cristiano Ronaldo presenta los peores números de su carrera en el Real Madrid con 0,76 tantos de media por encuentro, cuando durante las últimas cinco temporadas superó el gol por partido.
Karim Benzema tampoco está firmando un gran año. Cuenta 17 tantos en 37 encuentros para una media de 0,46 tantos por partido. Su peor estadística desde la temporada 2012-13, cuando hizo 0,40 goles por encuentro.
Con todo, lo que más le preocupa a Zidane es recuperar al mejor Gareth Bale. Realizó un gran inicio de temporada después de ser una de las estrellas de la Eurocopa, pero sufrió una grave lesión de rodilla y no ha vuelto a ser el que era. El partido ante el Atlético marcó su punto más bajo. Apenas dio 28 pases, sólo seis más que Keylor Navas, lo que explica el inexistente impacto de su actuación. Tanto es así que cada vez son más lo que piden que el galés deje su sitio a Isco y pase a la suplencia.
Sería toda una sorpresa, pues Zidane ya anunció hace meses que la «BBC» era «intocable». Y lo sigue siendo.
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