Cuando la última bandera a cuadros cae y el último box
cierra en un circuito, es hora de reflexionar. Qué ocurrió, cómo ocurrió, qué
se hizo bien y qué hay que mejorar para el futuro.

Tras un largo letargo llamado parón invernal llegaba la hora
de la verdad: comenzaba el domingo de carreras en el desierto. Una de las
mejores parrillas de la categoría de MotoGP de la historia, tres cajones de
podio y 24 pilotos hambrientos de victoria.

Tres posiciones VIP que serían para Andrea Dovizioso, Marc
Márquez y Valentino Rossi respectivamente.

Se recogen aquí las cinco caras y cruces de la carrera del
pasado domingo en Qatar para mí.

Las cinco caras de la moneda del GP de Qatar 2018

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El ritmo
del binomio italiano: Andrea Dovizioso ha reinado en Qatar desde los
entrenamientos. Un ritmo imbatible y una gran capacidad para domar a la diosa
roja (su Ducati) a la que poco fácil es coger sus riendas, sobre todo en el
paso por curva. Sin embargo, Dovizioso lo ha hecho este fin de semana y se ha
proclamado ganador a pesar de no hacer la mejor salida de la parrilla.

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La
perseverancia: Marc Márquez ha sido sin lugar a dudas una de las estrellas
que más brillaría en la carrera de MotoGP: desde su buena salida hasta el
último adelantamiento en la última vuelta disputándole la victoria al hombre
del fin de semana: Andrea Dovizioso. Su meta era el podio y la consiguió en una
carrera muy luchada en la que poco se podía hacer con el binomio italiano.

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Ejercicio
mental: Según comentó Johann Zarco el sábado, el primer día de GP tuvo que
hacer un ejercicio mental de concentración para dar todo de sí y sin que la
psicología le jugara una mala pasada. Muy bien lo tuvo que hacer. De hecho, el
sábado finalizaría a golpe de pole y comenzaría reinando en MotoGP hasta a
falta de cinco giros. Zarco ha mostrado que ha llegado para quedarse, que sus
estrategias de frenador pueden dar mucho que hablar y que merece casi como
nadie estar en la élite.

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La
veteranía: Una vez más el veterano de los veteranos, Valentino Rossi ha
mostrado que no sigue en Yamaha por casualidad. Una primera carrera del año en
la que comienza siendo tercero. Como si de un gran felino se tratase Valentino
acecharía a sus presas atacando como si tuviera todas las lecciones del
motociclismo en su mente y después  de
ver esa actuación a sus 39 años, ¿Quién podría negarlo?

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 La crítica: Si alguien ha sido crítico en
este GP consigo mismo y su montura ese ha sido Maverick Viñales. Ha mostrado
cómo saber en qué has fallado puede ser la llave que te abra la puerta a saber
qué tienes que cambiar. Así ha sido, tras darse cuenta de que lo probado en
pretemporada no es lo que funciona el español ha dado un paso atrás que le he
hecho dar un gran salto hacia delante. A pesar de su mala
salida el ritmo de carrera de Viñales sería destacable y podría seguir así
durante la temporada.

Los cinco cruces de la moneda del GP de Qatar 2018

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La
mecánica (Jorge Lorenzo): Cuando al primero que tienes que ganar –tu
compañero de equipo- gana en e primer GP del año y tú te caes a falta de diez
vueltas la dituación es cuanto menos frustrante. Es lo que ha acaecido al
mallorquín Jorge Lorenzo que se iba al suelo tras quedarse sin frenos. La parte
negativa es que es un cero en el casillero de Lorenzo pero la positiva es que
está bien para seguir puliendo su pilotaje y adaptarlo al hada roja (la
Desmosedici). 

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Mal fin
para un buen fin de semana: Un gran fin de semana para el de Suzuki ha
tenido el peor colofón, una caída a diez giros para el final –al igual que
Lorenzo- cuando rodaba sobre la sexta posición. El ritmo del de Suzuki fue
estupendo y hay muchas expectativas puestas en él. 

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Mal día
para los hermanos: Para los hermanos que sin duda no fue el fin de semana
sería para los Espargaró. Aleix se caería y aunque lograría levantarse
finalizaba 19º fuera de los puntos cuando esperaba estar delante. Por su parte
Pol ni siquiera conseguiría acabar la carrera.

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La
maldición de las segundas partes: Dani Pedrosa por su parte negociaría una
fantástica salida, llegando a ponerse segundo tras un implacable Johann Zarco
que parecía no dar su brazo a torcer. Sin embargo, el ritmo del “Pequeño Samurái”  caía por momentos finalizando séptimo
habiendo salido tan bien.

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Rozando la
historia: Johann Zarco no ha podido culminar un fin de semana perfecto.
Tras hacer la pole y liderar gran parte de su primera carrera de MotoGP su
ritmo comenzaría a caer sin lograr ni siquiera el podio. Finalizaba octavo, un
resultado bueno, pero que podría haber sido histórico: Un Rookie ganando en su
primer GP en MotoGP en una de las mejores parrillas de la historia de MotoGP.