La peor despedida. Osasuna jugó su último partido en Primera División en el Sánchez Pizjuán y se llevó una contundente goleada (5-0) que cierra una temporada horrible en todos los sentidos. Los rojillos terminan el curso en penúltima posición, con solo cuatro victorias en 38 jornadas y 94 goles encajados, el que más del campeonato liguero. Un clásico de la primera categoría del fútbol español ha durado un triste año en la élite. Le esperamos de vuelta.
La rajada de Tony Adams. Tremenda. El entrenador del Granada despachó de lo lindo tras acumular su séptima derrota en siete partidos a los mandos del Granada. Dejó por los suelos a los jugadores y hasta tuvo para el propietario, del que dijo que había «cometido muchos errores». De todo menos autocrítica en una gestión lamentable, a la altura de muy pocos técnicos en la Liga.
Zancadilla al árbitro. En el Camp Nou pudimos ver una de las escenas más lamentables de la jornada y puede que de la temporada. Jordi Alba, en el área, golpea el balón y cae. De repente, comienza a pedir penalti, pese a que no tiene ningún jugador del Éibar cerca. El árbitro, visto el estado en el que se encuentra el lateral culé, ¡lo pita! Por fortuna para los armeros y la justicia, Messi lo falló ante Yoel, pero igual habría que pensar en rearbitrar estas jugadas, tanto con el VAR como después del partido. No hay que añadir problemas a los colegiados, hay que quitárselos.
La costumbre de dejarse ir. Hay equipos que logran el objetivo mucho antes de lo esperado y aprovechan para pasear jornada tras jornada hasta el final de Liga. Es el caso de la Unión Deportiva Las Palmas, marcada por un conflicto entre la directiva, el cuerpo técnico y la plantilla, que pensaron que mejor se acababa ya la temporada, sin importar ni la afición ni el incentivo que supone el hecho de quedar más arriba en la clasificación. Tras ganar 4-1 al Betis, los canarios han sumado un único punto en siete jornadas, y han encajado goleadas en hasta cinco partidos.
Goles en propia: Rubén Vezo (Granada)
Expulsados: Ander Capa (Éibar) y Hernán (Las Palmas)
Penaltis fallados: Leo Messi (Barcelona)
