El Liverpool vuelve a la final de la Champions tres años después, para jugar su tercera en cinco años. Un éxito, porque en el fútbol y en la Copa de Europa solo gana uno. Solo estar presente ya tiene un mérito indudable. El Madrid jugará su quinta final de Champions en ocho años, una salvajada en el fútbol actual.
El fútbol de nuestros días cuenta con todos los elementos posibles para que no disfrutemos equipos hegemónicos. Un calendario salvaje, una pandemia mundial que lo cambió todo y también una tremenda igualdad que hace cada día más difícil ver equipos dominantes.
Jürgen Klopp ha conseguido en 7 años que su Liverpool sea un equipo reconocible y respetado con capacidad para ser otra vez importante en Europa. El parche estrellado que lleva en la manga derecha de su camiseta con un número seis lo fraguó a finales de la década de los 70. En aquellos años los reds escribieron su nombre con letras de oro y final trágico en la historia de la mejor competición del mundo a nivel de clubes.
El Liverpool jugó cinco finales de la Copa de Europa entre 1977 y 1985, ganó cuatro de las cinco exhibiendo un dominio del fútbol europeo extraordinario durante ocho años. El epílogo fue muy triste con la maldita final de Heysel en 1985. Unos incidentes que mancharon para siempre la historia del fútbol. Una final que jamás tuvo que disputarse aquel día tras los incidentes y que acabó con la victoria uno a cero de la Juve, cerrando la época más brillante de un conjunto inglés en Europa hasta nuestros días.
La UEFA sancionó al fútbol inglés prohibiendo a sus equipos jugar durante cinco años en competiciones europeas y al Liverpool en concreto con seis. El vandalismo de sus hooligans provocó el fallecimiento de 39 personas, todas italianas, en las dos horas previas al partido y ya dentro del estadio.
Ese terrible epílogo terminó con un equipo de leyenda, que primero de la mano de Bob Paisley, heredero de Bill Shankly, y después ya con Joe Fagan, hizo historia. Los Beattles y el fútbol hicieron que Liverpool viviera un estado de euforia permanente durante casi una década. De Melwood a Anfield se generó una leyenda que durante unos años parecía que fuera eterna.
Los Clemence, Neal, McDermott, Hughes, Thompson, Souness, Keegan o Dalglish asustaban y generaban admiración a partes iguales. El fútbol está lleno de guiños y encuentros maravillosos. Carlo Ancelotti se enfrentó y perdió como jugador al Liverpool en la final del 84 con la Roma, aunque ese día estaba lesionado. También perdió como entrenador la de 2005 con el Milan en Estambul y ha sido entrenador del gran rival del Liverpool en la ciudad del Mersey como es el Everton.
Será la tercera final de la Copa de Europa entre Liverpool y Real Madrid. De momento empate a uno. En la del 81, también en París, pero en el Parque de los Príncipes, el Liverpool se impuso al Madrid de los García por uno a cero con un gol de Alan Kennedy, ya en las postrimerías del partido.
Hace cuatro años en Kiev, Gareth Bale firmó su mejor actuación con la camiseta blanca, entrando en la segunda parte, y firmando dos goles, uno de ellos de una factura impresionante para dar el Real Madrid su decimotercer entorchado en la competición.
El próximo día 28 en Saint- Denis volverán a verse las caras dos de los equipos con más pasado y presente de la historia del fútbol. Klopp vs Ancelotti, dos estilos de fútbol muy distintos y una forma similar de entender la vida. Entre ambos, 19 Copas de Europa.
Disfruten…
Imagen de cabecera: @ChampionsLeague
