La Superliga da para escribir y hablar sobre ella durante horas y horas, y no es para menos. Estamos ante un proyecto que cambiaría radicalmente el día a día del fútbol como lo conocemos, no tanto del deporte en sí, sino del sistema de competiciones, su organización, reparto del beneficio económico, etc. Muchos cambios, muchas opiniones a favor, otras tantas en contra y, por tanto, mucho debate. Aprovechando que todavía no tengo una opinión formada al respecto del sí o el no a la Superliga, voy a tratar de ser objetivo con el tema.
A22 Sports es una empresa dedicada al sector de desarrollo deportivo a la que se le encargó tratar de sacar la Superliga adelante junto con los clubes fundadores que ya conocemos (Barcelona, Real Madrid y Juventus). Hoy han publicado un decálogo de reglas que seguiría una hipotética Superliga y el tema ha cambiado respecto a lo que se presentó en un primer momento. Uno de los puntos que más se criticaba del planteamiento inicial era el hecho de que sería una liga cerrada con muy pocas variaciones entre los participantes. Esta sería una manera de mantener siempre a los mismo clubes en la élite aunque su rendimiento no fuese acorde a su estatus, lo que no gustó nada en el mundo del fútbol. Comprensible. Al fin y al cabo, para los aficionados del fútbol de segundo/tercer escalón, gran parte de la emoción es que su equipo pueda codearse con los grandes en algún momento, una pequeña posibilidad que, siendo real, mantiene viva la ilusión. Como no podía ser de otra manera, es uno de los puntos clave que se cambió en este nuevo planteamiento. Esta vez aseguran que será una competición abierta y basada en el mérito deportivo, y que estará compuesta por entre 60 y 80 equipos repartidos en diferentes divisiones en función de los resultados obtenidos a nivel nacional. La cosa ha cambiado bastante.
Uno de los principales miedos y, por tanto, argumento de quienes están en contra es que puedan desaparecer las ligas nacionales. Según se deduce, la Superliga pretende sustituir -o cohabitar, pero no sé cómo- a la Champions League, no a las ligas nacionales. Y por si quedaba alguna duda, los equipos participantes en la Superliga participarán también las ligas nacionales, por supuesto.
En cuanto a cosas concretas más allá de palabras, A22 también ha dicho que aseguran 14 partidos europeos por temporada para cada equipo. Además, otro de los puntos clave recalcaba la importancia de la salud de los jugadores, lo que nos da a entender que no cargarán el calendario de partidos más de lo que ya está, que no es poco.
Todo esto coincide con el cambio de formato de la Champions League que entra en vigor en la temporada 2024/25. La Superliga todavía es un proyecto y nada asegura que se vaya a hacer, pero sí podemos decir que avanza por buen camino para sus impulsores. Como decía al principio, a nivel personal no tengo una opinión formada todavía, estoy a la espera de que se sepan cosas más concretas sobre cómo sería, a qué sustituiría y cómo afectaría a las ligas nacionales. Lo que sí, me parece que han estado muy acertados en esta ocasión. La primera vez que se hizo público el proyecto me sorprendió mucho la manera de tratar el tema, de dar la información que la gente necesita para posicionarse a favor de un cambio tan grande. No estuvieron nada acertados a nivel comunicativo. En esta ocasión, ya con cierto feedback del público, han rectificado cosas y lo han comunicado mucho mejor, todavía con carencias en mi opinión. Se está notando el trabajo de A22 a la hora de formar un proyecto más sólido y realista, pero la Superliga todavía está lejos.
Queda mucho por hablarse, escribirse y debatirse sobre la Superliga. También queda mucho trabajo por hacer por parte de sus impulsores y muchos frentes abiertos por cerrar. Es un cambio demasiado grande y la gente tiende a preferir quedarse en su zona de confort por lo que, para que se posicionen a favor del cambio, necesitan que se lo des todo masticadito y a su gusto, sino que se vayan olvidando. Con lo que sabemos a día de hoy es imposible que triunfe pero me juego un dedo a que se va a seguir trabajando en ella y quién sabe, igual en cinco años tenemos una nueva competición europea.
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