Tres carreras restan para concluir MotoGP: Australia, Malasia y Valencia.
Tres pilotos tienen serias opciones de título: Fabio Quartararo, Pecco Bagnaia y Aleix Espargaró.
Tres historias épicas muy distintas, acontecidas en el mismo tiempo y casi el mismo espacio, que merecen un final feliz.
Solamente una lo tendrá. En la placa que se añadirá al trofeo de MotoGP solamente cabe un nombre.
Los otros dos tendrán que conformarse con una gran historia, que no es poco.
Sin embargo, eso será dentro de unas semanas. Por el momento hay tres grandes historias que se han ganado el derecho a soñar con ese final feliz.
Y, como no hay nada de malo en dárselo, se puede convertir el desenlace de la temporada 2022 del Campeonato del Mundo de MotoGP en un ejercicio de ficción.
Como aquellos libros de ‘Elige tu propia aventura’. Cada uno de ellos contiene un subgénero épico, una leyenda transmitida de generación en generación sobre lo que sucedió en las tres últimas carreras de MotoGP 2022.
Si quieres que Fabio Quartararo conquiste el título 2022 de MotoGP, ve a ‘La epopeya de Fabio Quartararo’.
Si deseas que Pecco Bagnaia inscriba su nombre en la consabida placa, ve a ‘El romance de Pecco Bagnaia’.
Y, si lo que quieres es que Aleix Espargaró se proclame campeón, ve a ‘El cantar de gesta de Aleix Espargaró’.
A) LA EPOPEYA DE FABIO QUARTARARO
Encomendado a los dioses del diapasón, el apuesto piloto galo, conocido en la mitología por sus hazañas previas como Fabio I de Francia, encaró su particular odisea supliendo con su bravura la manifiesta inferioridad en la que se encontraba ante sus temibles rivales, sabiendo que tendría que dar lo mejor de sí mismo en las tres últimas batallas.
Cuando ya nadie apostaba por él, se encomendó a su particular musa -la Yamaha YZR-M1- para extraer la ambrosía de su paso por curva y elevarse victorioso sobre la línea de meta de Valencia, defendiendo contra viento y marea su trono para empezar a marcar una era de la que hablarán los libros de historia incluso con el paso de los siglos.
B) EL ROMANCE DE PECCO BAGNAIA
Allá en el Ricardo Tormo,
do terminan los mundiales,
se escuchan, en italiano,
mil cánticos celestiales.
Un nombre que se repite,
espantando así los males,
brazos que se alzan al cielo,
después de tantos pesares.
Tras 15 años a la espera,
y surcar los siete mares,
triunfal entra la Ducati,
entre destellos brillantes.
Y toda Italia, al completo,
con Rossi siempre delante,
entre vítores ensalza
a Pecco I, el grande.
C) EL CANTAR DE GESTA DE ALEIX ESPARGARÓ
Cantan los juglares, ¡por fin ha llegado el año!
donde el más veterano ha trepado a lo más alto,
De apellido Espargaró, como Aleix fue nombrado,
en el día más oscuro, siempre encontró un claro.
Puso rumbo a Aprilia, le dieron por naufragado,
Pero él siempre confío en pilotar ese barco,
Convertido en capitán, a la obra sumó manos
y en el puerto de Valencia alzó triunfal los brazos.
Imagen de cabecera: Moto GP
