Francia quiere volver a reinar en el fútbol y qué mejor manera de hacerlo que en casa. 16 años después del último gran torneo ganado – la histórica Eurocopa de Bélgica y Países Bajos –, la afición gala contempla con ilusión la llegada del torneo: por plantilla, son unos de los claros favoritos. Por detalles, también, pues talento les sobra, como demuestran en cada encuentro los Payet, Pogba & company.
En una Eurocopa marcada por el gran número de equipos que pueden alzarse con el título, Francia intentará hacer valer el factor campo. Deschamps, pese a las numerosas e importantes bajas, como Varane, Laporte, Lacazzette, Ribery, Gameiro o Benzema, sabe que cuenta con 23 hombres preparados para el reto y con un país detrás que les empujará cuando lo necesiten.
Si algo ilusiona especialmente ya no solo a la afición gala, sino también a los aficionados en general, es el centro del campo de Francia. Pese a la sensible baja de última hora de Lassana Diarra por lesión, el conjunto galo continúa contando con suficientes jugadores como para marcar las diferencias en esta línea. La única duda, de hecho, reside en saber quién le sustituirá y, por tanto, acompañará a los interiores Pogba y Matuidi: Kanté viene de hacer una temporada descomunal en el Leicester, pero también es cierto que con los foxes jugaba con Drinkwater al lado, no solo, mientras que Cabaye ha completado una campaña mucho más discreta, pero sí cuenta con experiencia en el sistema táctico 4-3-3, más allá de la indudable confianza del técnico.
Si bien es cierto que Kanté destaca en la faceta de recuperar balones, también lo es que su fuerte no es guardar la posición, algo que Cabaye y Schneiderlin – que parte con menos opciones de ser titular – sí dominan más. Tanto Pogba como Matuidi, por su parte, que en un 4-3-3 jugarían liberados, se encargarán de poner el talento en el centro del campo y dominar la zona: si Francia lo logra tendrá mucho ganado.
Una alternativa a considerar, que es de hecho como finalizó el encuentro amistoso ante Camerún, es variar el sistema y jugar con un 4-2-3-1. En este caso, el titular, indudablemente, sería Kanté que formaría pareja con Matuidi, mientras que Pogba enlazaría la media con la delantera desde la demarcación de media punta.
Sea como sea, la cuestión es que a Francia le sobra el talento en un medio del campo muy físico y que gran parte de sus opciones en esta Eurocopa pasan por esta línea.
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