El futuro del golf nacional ya está aquí. El relevo generacional que cualquier país desea ver en sus deportistas es una realidad para España gracias a la irrupción de Jon Rahm en la élite. A sus 22 años y menos de uno como profesional, el joven vasco se ha convertido en un referente a nivel internacional fruto de sus espectaculares actuaciones en su (aún) incipiente carrera.
Sin nada que perder y toda una trayectoria por delante para errar y aprender, el de Barrica (Vizcaya) ha dado sus primeros pasos en la élite del golf con una seguridad y un aplomo dignos de un jugador curtido en mil batallas. A diferencia de cualquier otro rookie que juega sus primeros torneos profesionales, Rahm no se sintió cohibido por la presencia de grandes estrellas de este deporte como Rory McIlroy, Jordan Spieth o el actual número uno del mundo, Dustin Johnson.
Es más, en los pocos meses que lleva como profesional, el vasco ha sido capaz de plantar cara y, sobre todo, asustar a más de uno de los “favoritos” de los diferentes torneos en los que ha participado. Y es que Jon Rahm parece seguir la estela de su compatriota Sergio García, que ya destacó en su juventud por su precoz talento. De ahí que recibiera el cariñoso apodo de ‘El Niño’.
Un Rambo a la española
A Jon, sin embargo, se le queda corto este apelativo teniendo en cuenta cómo le llaman en Estados Unidos, donde se ha formado como golfista. El apodo con el que se le conoce al otro lado del charco es Rambo, por lo parecido que es su nombre al del personaje de ficción encarnado por Sylvester Stallone (John Rambo) así como por su condición física y su potente juego.
A diferencia del excombatiente de Vietnam, quien hace frente a sus oponentes armado hasta los dientes, el español se bate a si mismo en cada recorrido de 18 hoyos con su juego y su destreza con los palos como principales armas. No obstante, una gran habilidad y un juego bonito nunca son suficientes en este deporte y, sorprendentemente, Jon Rahm, a pesar de ser primerizo, lo tiene claro y es capaz de demostrarlo.
La templanza y la regularidad durante cuatro días de competición – que es el período de tiempo que suele durar un campeonato – son los factores clave que marcan la diferencia entre un jugador de alto nivel, capaz de ganar un torneo, y uno que brilla, de manera efímera, pero no llega a deslumbrar. Para sorpresa de los amantes del golf, el debutante Jon Rahm presenta un perfil más parecido al primero de los dos descritos, el del que lo tiene todo para triunfar. De hecho, solo unos meses le han bastado para alzarse campeón en el Abierto de San Diego.
Un reto para Dustin Johnson en Augusta
Otra muestra de que Jon Rahm no es una estrella de efímeros destellos fue el espectacular torneo que realizó en el WGC-Mexico Championship, su primer campeonato mundial. El español mantuvo el ritmo que marcaron los mejores jugadores del planeta e, incluso, fue capaz de liderar el torneo en los últimos hoyos de la jornada definitiva, aunque finalmente fue tercero. No obstante, no se amilanó en ningún momento y supo cómo tratar de tú a tú a Dustin Johnson, el actual número de mundo y flamante ganador del campeonato mexicano.
Rahm debutó y triunfó. Una inmejorable actuación que le valió, en primer lugar, para colocarse en el puesto número 25 del ranking de mejores jugadores del mundo y, en segundo, para permitirse tutear y twittear a Dustin Johnson. El joven vizcaíno, a través de su cuenta de Twitter, además de darle la enhorabuena por llevarse el torneo de México, “pidió” la revancha al campeón americano en un torneo más importante aún, el Masters de Augusta, el primer major de la temporada.
Así se presenta Jon Rahm, como un jugador lleno de ambición, talento y mucho golf con el que mostrar su valía y, al mismo tiempo, hacer disfrutar a sus seguidores y a cualquier amante de este grandísimo deporte.