Esta XXVI edición de la Copa de España de fútbol sala ya conoce a sus finalistas. Jaén Paraíso Interior y F. C Barcelona serán los protagonistas en el último y decisivo encuentro, que dictaminará quién se alzará, finalmente, con el preciado trofeo.
Ambos conjuntos han superado sus semifinales de modos muy distintos. Jaén ha sufrido en exceso, mientras que el Barça ha gozado de un partido “cómodo” desde el inicio.
El equipo jienense se ha enfrentado, en un durísimo choque, al otro debutante en esta competición, el Burela Pescados Rubén. Los de Dani Rodríguez llegaban como favoritos a este duelo tras eliminar a ElPozo en cuartos, y por su posición en la liga respecto a su rival. Pero Burela, que ya había protagonizado la sorpresa con mayúsculas de la Copa, tras vencer a Inter en su primer partido, no se lo iba a poner nada fácil a los andaluces. El encuentro comenzó con mucho respeto por parte ambos equipos.
Ni Jaén ni Burela se alzaron claramente a por el partido, sino que estuvieron más pendientes de defender y de no cometer fallos, que de intentar llevar la manija y el peso del partido. Aun así, se pudo ver alguna que otra ocasión de gol por parte de uno y de otro, pero ninguna acabó en gol, por lo que la primera parte terminó con el resultado de empate a cero. En la segunda mitad, el partido transcurrió de un modo totalmente distinto. Los dos equipos se quitaron de un plumazo esa presión del que no quiere perder, y se volcaron al ataque. Fue entonces, cuando el juego ganó en emoción e intensidad. En una bonita jugada en la que Chano asistía de tacón a Iago Míguez, llegó el primer gol para Burela, que cobraba ventaja en el marcador. Jaén reaccionó, pero sus jugadas no acababan de encontrar premio. Ya en el ecuador de la segunda mitad, Burela volvió a marcar por medio de Chano, y todo apuntaba a que el partido caería del lado gallego. Pero aún quedaba tiempo. Tan solo unos segundos después de comenzar a atacar de cinco, Jaén consiguió recortar distancias por medio Cuco. Este gol le dio alas y esperanzas a “El Olivo Mecánico”, que comenzó a abalanzarse una y otra vez sobre la portería rival. El tiempo pasaba rápido, el marcador de 2-1 no se movía, y cuando todo parecía estar decidido, en la última jugada del partido, Dani Martín conseguía empatar y enviarlo a los penaltis. Finalmente, desde los lanzamientos de seis metros, Jaén acabó imponiéndose por 5-4, con Gonzalo como el gran héroe, ya que paró el lanzamiento decisivo.
Por su parte, el F.C Barcelona no pasó tantos apuros en su eliminatoria de semifinales ante Magna Navarra. Desde el pitido inicial, el conjunto de Marc Carmona mostró su superioridad frente a la escuadra navarra. A los tres minutos de partido, el equipo culé ya mandaba por 2 goles a 0 en el marcador, gracias a los tantos de Wilde y de Bateria. Y esa fue la tónica de la primera mitad, un Barça dominador, y un Xota que intentaba hacer todo lo que estaba en sus manos para poder igualar el partido. Ya en la segunda parte, Wilde volvía a golpear a favor de los cules, y hacía el 3-0. Magna Navarra seguía creyendo en la remontada, e intentaba dar un paso al frente y llevar el peso en ataque. Pero sus esperanzas se desvanecieron con el cuarto tanto azulgrana, obra de Rafa Usín. Con el portero jugador en pista, el equipo de Imanol Arregui gozó de ocasiones, y en una de ellas vino el premio mediante un gol de Tolrà. Finalmente, el marcador no se movió y todo termino con la victoria del Barça por 4-1.
Este domimgo nos espera la gran final. A priori, el F.C Barcelona se sitúa como favorito, pero Jaén ha demostrado que en esta Copa, la vitola de principal candidato no significa nada. Veremos a ver qué sucede. Lo que sí está claro, es que el Quijote Arena volverá a disfrutar de un enorme partido de fútbol sala, y en esta ocasión, el desenlace del mismo aguardará un campeón.