Inglaterra quiere ser campeona de Europa de una vez por todas. Los inventores del fútbol no han conseguido reinar en el viejo continente en ninguna ocasión, ni tan siquiera disputar una final. Este puede ser el año. Se cumple el 50 aniversario de su único Campeonato del Mundo, aquel Mundial del ’66 que ellos mismos organizaron y conquistaron gracias a los Bobby Charlton, George Hurst y compañía. La temporada en la cual han presenciado uno de los mayores hitos de la historia del fútbol en su liga doméstica; la Premier del Leicester, tienen la intención de alargar su estado de gracia y brindarle a la Reina Isabel II el título que sus longevos 90 años de vida no han podido disfrutar.
La fase clasificatoria para Francia 2016 es una invitación a soñar. Un concurso inmaculado saldado con 10 victorias en 10 partidos jugados con 31 goles a favor y tan solo 3 en contra. Tiene una de las mejores plantillas de la Eurocopa, sobre manera en la parte delantera, donde se decide el juego; en el área. La voracidad de Harry Kane, la versatilidad de Sturridge, el liderazgo de Rooney y un Jamie Vardy tocado por una varita mágica en este 2016, si es que Hodgson se atreve a alinearlo, claro. Por no hablar de Marcus Rashford, el teenager de moda que a sus 18 años ya ha conseguido inscribir su nombre con letras doradas en la historia del Manchester United.
Quizá la gran incógnita sea el rendimiento que pueda obtener de un mediocampo formado por jovencísimos jugadores como Dele Allí o Eric Dier junto con la fragilidad de Wilshere y Henderson en lo que a las lesiones se refiere. Por su parte, Milner y Lallana tratarán de aportar el grado de experiencia que complemente a sus compañeros anteriormente citados aunque no son jugadores TOP. Ante selecciones como España, Francia o Alemania que poseen un centro del campo mucho más potente en calidad y poblado con futbolistas contrastados con experiencia en grandes citas; los Mundiales de 2010 y 2014 junto con la Eurocopa de 2012 avalan a bávaros y españoles, puedan sufrir los británicos.
La defensa y la portería pecan un poco de esa irregularidad y juventud previamente aludidas. Joe Hart, Smalling, Cahill, Walker, Bertrand o Clyne se encuentran ante su gran oportunidad. Distan mucho de alcanzar la contundencia de algunos de sus homónimos como Piqué, Sergio Ramos, Chiellini o Hummels pero en ilusión y ambición por demostrar pueden competir con cualquiera. Roy Hodgson ha apostado por un 4-3-1-2 en los amistosos de preparación con Kane y Vardy/Sturrdge arriba mientras Rooney/Allí enlazaba por detrás. Los últimos rumores apuntan al 4-3-3 con Rooney en el mediocampo y Kane como único punta flanqueado por Sterling y Lallana en las bandas. El sábado saldremos de dudas.
Una buena plantilla, quizá no la mejor del torneo, pero la fase de clasificación está ahí. Un equipo joven con calidad y capacidad de anotar goles fácilmente frente a la irregularidad de algunos de sus hombres y la etiqueta implícita en las últimas generaciones inglesas aparentemente avocadas al fracaso. Las opciones de Inglaterra pasan por dejar atrás para siempre los viejos fantasmas del pasado reciente e inspirarse en los foxes. Nadie los tomará como favoritos y no tienen el mejor equipo de Europa pero con una pelota de por medio en el césped todo puede pasar. Francia será el testigo; historia o decepción.