Balance 2014/2015
SUFICIENTE. El curso del FC Schalke 04 comenzó con una durísima derrota en la primera ronda de DFB-Pokal. No ocurría algo similar desde hacía 25 años. Las sensaciones en Bundesliga no cambiaron, malos resultados, juego irregular y unos partidos de Champions discretos llevaron al cese de entrenador un mes antes de navidad. Jens Keller no se comió los turrones en casa y el italiano Roberto Di Matteo cogió el timón del equipo en el banquillo. El equipo mejoró notablemente, el cambio en el sistema de juego y la rigurosidad defensiva le dieron más capacidad competitiva. Sin embargo, la mala suerte con las lesiones ocasionó que la falta de jugadores en posiciones exigidas provocara que la temporada se hiciera larga y pese a la casi hazaña en el Santiago Bernabéu, los chicos de Gelsenkirchen no consiguieron los objetivos marcados en Bundesliga y tan solo arañaron una sexta posición in extremis que les deja sin Champions League pero que al menos les permite jugar la UEFA Europa League.
Perspectivas y objetivos
En el Veltins Arena esta campaña se presenta descafeinada. Siempre las exigencias en la localidad de Gelsenkirchen son grandes pero con una plantilla sin apenas estrellas consagradas las sensaciones son menos positivas. La venta de Julian Draxler en el último día de mercado ha dejado al equipo sin su estandarte de cabecera. También abandonaron el club, Boateng y Farfán. Aun así, la base del conjunto de Breitenreiter es la juventud, hombres como Goretzka, Geis, Meyer, Sané o Hojbjerg, acompañados por experiencia con Höwedes y Huntelaar, tienen que coger el protagonismo sobre el terreno de juego. La gran acumulación de buenos talentos del centro del campo hacia delante hace que el nivel de exigencia sea superior y que el banquillo tenga garantías para competir en los tres desafíos que tienen esta temporada.
La filosofía de juego y sobre todo el sistema de juego es la gran variable que provoca una cierta ilusión entre el aficionado minero. Grandes equipos europeos tienen su seña de identidad, su estilo propio y el Schalke es de esos equipos que sigue y sigue buscándolo. Pues bien, tras una pretemporada ramplona, el conjunto alemán parece haber dado con la tecla para combinar la solidez defensiva con la creación de ideas. ¿Qué falta? La chispa en ataque, el gol. El Schalke ahora mismo lo tiene todo para construir un buen proyecto de futuro y consolidarlo… cuestión de paciencia, veremos si la tienen este año con Breitenreiter.
Altas y Bajas
Altas
Johannes Geis (Mainz 05) – 12M€
Matija Nastasic (Manchester City) – 9,5M€
Franco Di Santo (Werder Bremen) – 6M€
Júnior Caiçara (Ludogorets) – 4,5M€
Pierre-Emile Höjbjerg (Bayern Múnich) – cesión por 1M€
Alexander Nübel (SC Paderborn) – 200.000€
Sascha Riether (SC Freiburg) – Libre
Felipe Santana (Olympiakos) – Vuelta de cesión
Bajas
Julian Draxler (VfL Wolfsburg) – 35M€ + 5M€
Jefferson Farfán (Al-Jazira) – 7M€
Kyriakos Papadopoulos (Bayer Leverkusen) – 6,5M€
Maurice Multhaup (FC Ingolstadt) – 500.000€
Marcel Sobottka (Fortuna Düsseldorf) – 200.000€
Christian Fuchs (Leicester City) – Libre
Pascal Itter (SV Grödig) – Libre
Tranquillo Barnetta (Philadelphia) – Libre
Timon Wellenreuther (Mallorca) – Cesión
Chinedu Obasi (Sin equipo) – Libre
Felix Schröter (1.FC Heidenheim) – Cesión
Jan Kirchhoff (Bayern Múnich) – Vuelta tras cesión
Kevin-Prince Boateng (sin equipo) – Libre
XI Ideal
Fährmann; Caiçara, Nastasic, Höwedes, Kolasinac; Geis, Goretzka; Hojbjerg, Meyer; Sané, Huntelaar.
André Breitenreiter
El técnico alemán se enfrenta a uno de los mayores retos de su vida. Con poca experiencia, tan solo ha estado un año al mando de un equipo de Bundesliga (el recién ascendido Paderborn) llega a Gelsenkirchen para intentar dejar huella. A sus 41 años tiene carisma suficiente para afrontar el desafío. Llega a un equipo mermado por los cambios de entrenador y llega para quedarse mucho tiempo. Intentará situar al Schalke en el TOP3 de Alemania y conseguir ser regular durante toda la temporada. Con pocas estrellas pero con muchas perlas tiene la ocasión de hacer historia, por delante tres competiciones apetecibles y muchos partidos en juego para construir sus sueños.