En una sociedad que tiene muchos aspectos machistas y muchos problemas por resolver en un mundo como es el del deporte, un grupo de chicas nos ha dado una lección. No es habitual que un equipo compuesto íntegramente con miembros de un sexo compita en una liga con equipos del otro sexo pero si no hay posibilidad de formar una liga para aparte por temas económicos, de número de participantes o cuales sean, no deben verse privados de su derecho a competir y disfrutar del deporte.
El AEM de Lleida acaba de darles una lección a todas las mentes machistas que piensan que las chicas no deberían competir contra chicos, o viceversa. En la segunda división de la categoría infantil de Catalunya este equipo formado totalmente por chicas ha ganado la liga con 19 victorias, dos empates, una derrota, el Pichichi en sus filas (Andrea Gómez) y el Zamora (Laura Martí). Su entrenador, Dani Rodrigo, ha admitido que los calificaban como «locos» por inscribir al equipo en una liga masculina pero los resultados han hablado por sí mismos. Han hecho historia.
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La pasada temporada finalizaron terceros y este año han ganado la liga. La división de géneros se hace para fomentar la igualdad, porque la fisiología de los chicos los hará destacar en unos aspectos determinados y a las chicas en otros, por lo que si compiten juntos habrá mas competitividad pero ya está, en ningún caso un género es inferior al otro y el ejemplo del AEM debería bastar para que las mentes retrogradas y machistas cambien su opinión.
Bueno, en realidad no deberían cambiar solo porque este equipo haya ganado la liga sino que ese pensamiento no debería existir en ninguna mente en pleno siglo XXI, pero bueno, sigue habiendo gente que acude a los campos de fútbol a pegarse, por ejemplo, y hay cosas que, por desgracia, no cambiarán nunca. ¡Bravo, AEM!
