La lluvia había sido clara protagonista de las carreras de Moto3 y Moto2, en las que no faltó emoción. Amenazaba también con turbar la tranquilidad de Marc Márquez en MotoGP, y cumplió dicha amenaza. La prueba de la categoría reina fue de todo menos tranquila. Emoción e incertidumbre se aunaron en una carrera que no defraudó como espectáculo.
CINCO MOMENTOS
1. Petrucci al agua: La lluvia había convertido esa montaña rusa con tobogán llamada Sachsenring en todo un parque acuático, y a Danilo Petrucci le había pillado con el bañador. Se había puesto primero en la cola y estaba disfrutando de las atracciones como un enano, hasta que en una de esas cogió demasiado impulso y se quedó sin piscina. Para colmo, cuando volvió a intentarlo su Desmosedici amenazaba con arder y se fue a boxes. Demasiado on fire.
2. Dovi, el soñador: Sin Petrux, el mando de las operaciones era tomado por Andrea Dovizioso, que se había zafado de Valentino Rossi y parecía tener mejor ritmo que sus perseguidores. Aunque no lograba escaparse, el sueño de lograr su segunda victoria en MotoGP estaba muy presente; pero la pista comenzaba a secarse, y el calor de las gomas iba abriendo un carril, al evaporarse el agua… al tiempo que también se evaporaban las esperanzas del italiano.
3. Dirt track King: Márquez no estaba teniendo un día fácil en la oficina. Superado por Rossi, Dovi y Petrucci a las primeras de cambio, también se veía relegado por otros pilotos más inesperados como Jack Miller y Héctor Barberá… pero todavía podía ir peor: se hizo un recto tremendo que parecía convertirse en caída, pero con una maniobra más propia del dirt track enderezó su Honda y retornó al asfalto. Eso sí, había descendido hasta la novena posición.
4. Orejas de burro: Tras la excursión por la agricultura, Marc decidió que la pista ya estaba para slicks y entró a cambiar. Por delante, un quinteto formado por Dovi, Rossi, Miller, Crutchlow y Barberá rodaba destacado… pero hasta seis segundos más lentos que Marc con los lisos. Pasaban las vueltas y ninguno entraba, sirviéndole el triunfo en bandeja al 93. Cuando cambiaron ya era demasiado tarde: los cinco se hicieron acreedores de unas orejas de burro.
5. Doblete de Honda: Entraron todos menos Miller, al que Marc superó como un obús. Cuando salieron los cuatro que rodaban con el australiano, fueron superados por un Scott Redding que había entrado antes y que iba lanzado a por la segunda posición. Sin embargo, sus intermedios se desgastaron, se vio superado por Crutchlow -que aseguró un nuevo doblete de Honda- y, en la última vuelta, por Dovizioso, que le arrebató el que hubiera sido su segundo podio seguido.
Clasificación Alemania 2016
Moto2: Zarco +25
Johann Zarco se impuso en la última curva al local Jonas Folger, en una victoria que vale por mucho más, ya que sus tres principales rivales en la general (Álex Rins, Sam Lowes y Thomas Luthi) no puntuaron al irse al suelo. La gran alegría fue el tercer puesto de Julián Simón, que regresó a un podio que no pisaba desde 2012.
Moto3: Pawi no era broma
El debutante malasio Khairul Idham Pawi volvió a demostrar que no tiene rival sobre el asfalto mojado, y se llevó la victoria con un mundo de ventaja sobre los italianos Andrea Locatelli y Enea Bastianini. Jorge Navarro, convaleciente, terminó séptimo justo por delante del líder de la general, el sudafricano Brad Binder.
GRANIZADO DE IDEAS
A los mejores no se les puede dar una segunda oportunidad, porque te ganan. Por primera vez en siete años, Marc Márquez daba muestras de debilidad en el que siempre ha sido su circuito predilecto: Sachsenring. Sin embargo, volvió a ganar: por sus aciertos y, sobre todo, por los errores (o la ausencia de aciertos) de sus contrincantes en el momento clave.
Por el contrario, él transformó su único error en un acierto, evitando la caída poniendo pie a tierra para derrapar como si estuviese en el óvalo de la Superprestigio, una acción que a la postre sería decisiva. Si hace un año Rossi venció en su catedral haciendo motocross, este año Márquez ha defendido su templo practicando dirt track.
Vuelve a ganar cinco carreras después, y con su primer triunfo de 2016 en el viejo continente, suma 25 puntos que a efectos prácticos suponen casi 50. Para ser exactos, 49. Sus 25 y los 24 que dejó escapar Jorge Lorenzo. Un triste punto que le pone el título muy cuesta arriba en un inicio de verano para olvidar cuanto antes. La mejor noticia para él es la llegada de las vacaciones.
Rossi dijo haberse impuesto un periodo de castidad tras su caída en Assen, quedándose en casa para pensar y preparar Sachsenring. No le estaba yendo mal del todo, hasta que decidió quedarse en pista cuando ya era muy evidente que lo mejor era entrar a cambiar de moto. Posiblemente no hubiera ganado habiendo entrado antes, pero el podio sí era posible.
El que volvió a saborear las dulces mieles del cajón fue Cal Crutchlow. En una temporada que no pudo empezar peor, el díscolo británico se destapó con una gran remontada en el tramo final de carrera, en la que superó a Dovi y Redding para repetir la segunda posición lograda en Sachsenring en 2013, entonces con la Yamaha del Tech 3. Ah, y nada más terminar, llamada a Lucy en el parque cerrado, que la paternidad está al caer. Doble felicidad.
Dovi vuelve al podio ocho carreras después. Sabor agridulce porque parecía ser el favorito en agua, y por la sensación de que un cambio de moto más tempranero le hubiese dejado en disposición de, al menos, pelear la victoria. La dulzura llegó en la última vuelta, cuando al menos pudo llegar hasta Redding para arrebatarle el tercer puesto e impedir el segundo podio consecutivo sin presencia italiana. Un Scott que se quedó sin podio por muy poco, pero que sigue evidenciando una progresión más que interesante en la clase reina, amén de ser una de las ruedas a seguir en agua.
Quinto fue Iannone tras una Iannonada (?) más peligrosa que sorprendente tratándose de él: dio un brusco cambio de dirección para entrar a boxes. Miró primero, sí, pero aun así estuvo mal. Y, tras él, un Pedrosa que entró a tiempo a cambiar de moto y que pudo soñar con el podio, pero que volvió a verse lastrado por su dificultad para calentar los neumáticos.
Destacar también a Miller, que por momentos soñó con reeditar la machada de Assen y que acabó en una destacada séptima posición; y a Petrucci. El 9 se cayó, pero se cayó por querer ganar. Ya sabe lo que es ser segundo (Silverstone 2015) y, cuando la pista está mojada, eso ya no le vale.
Finalmente, recordar también a Stefan Bradl. El alemán no pudo correr en la prueba de casa al sufrir una conmoción cerebral tras caerse en el warm up. Mejor prevenir, desde luego. En Austria te esperamos, Stefan.
Y a todos vosotros también. Hasta entonces, a disfrutar de la playita. Servidor se baja ahora mismo a darse un chapuzón, que en el chiringuito hay un granizado esperándome.
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