El atleta portugués de origen nigeriano no tuvo camino fácil hasta ser atleta mundial. Según 20 minutos, cuando era niño, en Nigeria, empezó siendo jugador de fútbol. Con 14 años, un entrenador le dijo que probara, por sus condiciones, en el atletismo. A sus 16 años, hizo las maletas y puso rumbo a Europa, concretamente a Portugal, en busca de una vida mejor. Tras ser rechazado por las academias de atletismo de Sporting y Benfica, sus primeros años en Portugal tuvo que dormir cerca del Estadio Nacional mientras sobrevivía trabajando de albañil.
Con 21 años, empezó a competir a nivel profesional. En su palmarés tiene una plata y un bronce en Mundiales, una plata olímpica y tres oros y una plata en Europeos, entre otras victorias. Su mayor éxito fue en Atenas 2004, cuando consiguió una plata olímpica, el norteamericano Justin Gatlin le superó por sólo una centésima de segundo. La plata de Obikwelu le supuso, además, superar el histórico récord europeo de Linford Christie de los 100 metros.
Con 38 años, se ha retirado recientemente según las últimas publicaciones. “Yo ya gané todo. Ya tengo 36 años. He cumplido todos mis sueños: campeón de Europa, récord europeo, etc. Ahora me toca entrenar a atletas jóvenes; es una labor para mí importantísima. Aprenden muchas cosas conmigo porque yo tengo mucha calidad como entrenador”. comentó el ex atleta a Rincón Olímpico. Un ejemplo a seguir por su capacidad de sacrificio y ambición. Porta el gen ganador