Tenemos el primer lío de la temporada 2017 de Fórmula 1. No ha comenzado aún la pretemporada en el circuito de Montmeló y ya hay tensión entre los equipos. Como casi siempre, el hecho reside en una interpretación del reglamento. Y es que al parecer, Mercedes y Red Bull han desarrollado un sistema de suspensión activa. Con este diseño, sus monoplazas obtendrían unas ventajas bastante considerables tanto en paso por curva como en recta. Hasta aquí todo bien, pero el problema llega cuando el resto de equipos no ha sido capaz de conseguir esta suspensión. Encabezados por Ferrari, se están quejando a la FIA del diseño de Mercedes y Red Bull, alegando que es una mejora mecánica que ayuda a la aerodinámica, hecho que esta prohibido en el reglamento.
Pero, ¿qué es la suspensión activa? Este mecanismo es una mejora de la suspensión, que da principalmente dos beneficios. El primero de ellos es en el paso por curva, sobre todo por curva lenta. Cuando el monoplaza está tomando una curva hacia la izquierda, el coche tiende a ir hacia la derecha, ya que la tendencia natural es seguir recto. Debido a este efecto, la parte izquierda del monoplaza se levanta un poco, lo suficiente como para no tener el coche perfectamente equilibrado. Con la suspensión activa lo que se consigue es que el monoplaza permanezca en equilibrio en la curva, es decir, corrige la tendencia del coche de desplazarse hacia al lado contrario al que es la curva. Gracias a este equilibrio, se consigue alargar la vida del neumático, ya que el desgaste es más uniforme en toda la goma.
El segundo de los beneficios viene en el paso por recta. La ayuda que genera este sistema en recta es la de reducir varios puntos de carga aerodinámica, con lo que al ofrecer menos resistencia, el coche tiene más velocidad punta. Además, al acercar más aún el monoplaza al asfalto, el difusor actúa de manera más eficiente, ayudando a mejorar la velocidad en el paso por recta, haciendo que el coche acelere mejor y consiguiendo unos kilómetros por hora extra.
Las ventajas de la suspensión activa son evidentes, el problema está en no poder conseguirla. Se rumorea que ni Ferrari ni McLaren han conseguido desarrollar este modelo que Mercedes y Red Bull van a implementar en las cuatro ruedas de sus monoplazas. Conseguir que la FIA prohiba este mecanismo va a ser tarea complicada, pero en Ferrari están dispuestos a luchar. Con el reglamento en la mano lo tienen bastante difícil, ya que es una mejora mecánica, y aunque ayude a la aerodinámica, lo hace dentro de la normativa.
El camino por donde pueden conseguir su prohibición es en que el coche se pegue al suelo más de lo permitido, por lo que entonces sí sería ilegal. La ayuda es evidente, y si solo dos equipos han conseguido desarrollarlo, puede que sean muy superiores al resto esta temporada. La lucha, tanto en las fábricas como en los despachos ha comenzado. Para el desenlace queda aún. Sigan atentos y disfruten de las nuevas ventanas que abre la nueva Fórmula 1.