Cuando contamos los años y los días que tiene un jugador hay dos razones inexorables: es muy joven y ha hecho algo muy destacable. Es el caso de Ferran Torres. A sus 20 años y 269 días, los aficionados del Manchester City se debaten ya entre mantenerle el sobrenombre de “Bargain” con el que le recibieron en agosto (“La gran ganga”) o el de “Wonderboy” (“Chico maravilla”) con el que le han apodado tras sus tres goles consecutivos en la Champions.
“Ha sido un ‘bargain’, sin duda. Me sorprendió cuánto se pagó por él. El City yo creo que habría estado dispuesto a pagar más, pero el Valencia tiene dificultades financieras y acabaron pagando sólo 23 millones”, explica Paul Hirst, periodista de The Times que cubre la actualidad de los equipos de Mánchester. “A veces es difícil para los jugadores acostumbrarse a Inglaterra, pero Ferran lo ha hecho fácilmente. Ha marcado cuatro goles y suma dos asistencias en once partidos, eso no es fácil. Está siendo uno de los mejores jugadores de la plantilla esta temporada.”
“Los aficionados pensaron que debía tener mucha confianza en sí mismo para llevar el dorsal de una leyenda como David Silva, pero ya no hay escépticos”, apunta Hirst. Sobre todo, desde el pasado martes 17 de noviembre cuando Ferran anotó su tercer gol en Champions con la camiseta ‘citizen’ y pasó a la historia del club al ser el primer jugador en lograrlo en sus tres primeros partidos de la máxima competición europea, ante Oporto, Olympique de Marsella y Olympiacos. A ser el “Wonderboy”, el “Chico maravilla” del City, como le llaman.
Sumado al que anotó en su último partido de Champions con el Valencia en la vuelta de octavos ante Atalanta el pasado 10 de marzo, son cuatro goles consecutivos en Champions a los 20 años y 40 días, lo que lo convirtió en el tercer jugador más joven en lograrlo sólo por detrás de Kylian Mbappé (con 18 años y 120 días) y de Erling Haaland (a los 19 años y 107 días).
Frente a Olympiacos tendrá esta tarde (18.55h., Movistar Liga de Campeones) una nueva oportunidad de marcar en la cuarta jornada de la fase de grupos. Si lo hace, batiría su propio récord en el City y se quedaría a uno de igualar los cinco partidos consecutivos de Champions en los que anotó Haarland con la camiseta del Salzburgo en la Champions 2018-2019 -hat-trick en casa al Genk (6-2), otro tanto en el 4-3 contra el Liverpool en Anfield, un doblete ante el Nápoles en casa (3-2), el gol del conjunto austríaco en el 1-1 en San Paolo y anotó el cuarto del 1-4 ante el Genk.
Ayer Ferran Torres fue el protagonista del City en la rueda de prensa previa junto a un Pep Guardiola que sólo tiene elogios para el jugador de Foios: “Estoy más que satisfecho con su actuación en el campo pero sobre todo en el vestuario. Es un chico humilde y tímido, querido y sigue siendo como sabíamos. Estamos más que encantados con él dentro y fuera del campo.”
Unas buenas palabras sobre el jugador que compartió este verano con Luis Enrique cuando se oficializó su fichaje. El seleccionador nacional, que ya lo seguía de su paso por la Selección sub-17 y sub-19, llamó a su amigo Pep para felicitarle por la nueva incorporación ‘citizen’. Ahora lo disfrutan ambos. El pasado 3 de septiembre Luis Enrique lo hizo debutar ante Alemania en su primera convocatoria con la Roja. Marcó en el siguiente partido ante Ucrania y convirtió un hat-trick en el último, de nuevo ante los de Joachim Löw. El internacional español ha anotado ya cuatro goles en siete partidos con la selección absoluta.
Tras su primer partido con la Roja, Ferran dijo que se sentía como un niño, pero el niño se ha hecho mayor en apenas dos meses y fue él quien se llevó el balón debajo del brazo a su apartamento acristalado en el centro de Mánchester, del que no se mueve más que para los entrenamientos debido al ‘lockdown’, al confinamiento inglés, ése que sólo le ha permitido salir a comer un día a un restaurante italiano y que le hace ansiar la paella.
Pero las visitas “cocinitas” tendrán que esperar un poco más. Mientras, recibe clases de inglés online –también Sterling le echa una mano y a cambio éste aprende un poco de español-, mantiene su trabajo físico diario de manera telemática con su entrenador personal y recibe en casa a la chica que le ayuda con la limpieza y a su cocinero. Cocinero que es el mismo que tiene Pep Guardiola, por petición del jugador. “Ferran es súper profesional. Sólo piensa en el fútbol y eso es fundamental para Guardiola”, señala Hirst.
Con lo que cuenta y me cuentan, no sorprende que el técnico catalán y Ferran vivan entregados a la causa ‘citizen’ con tal reciprocidad, la que el jugador anheló en el Valencia a pesar de la apuesta del club de hacerle ficha con el primer equipo a sus 17 años, cuando Barça, Madrid y Juve andaban al acecho. Paradójicamente, se marchó al frío Mánchester en busca de calor. De una apuesta firme por él, de sentirse querido y valorado tras haberse visto asomado involuntariamente a casi cada ventana de mercado por una posible cesión. Y lo ha encontrado rápido en Pep y la plantilla. “Se lleva bien con todos sus compañeros, sobre todo con los españoles, como Eric García. También con Phil Foden, son de la misma edad”, explica el periodista británico. Con Foden llega a los entrenamientos. Ferran recoge a su compañero, sin carnet, con su coche inglés, circulando por la derecha. Iba a decir como mayormente en el terreno de juego, pero eso era a. G. (antes de Guardiola).
“No es fácil entender lo que pide Pep, pero lo ha hecho bien hasta ahora. Lo que más le gusta a Pep de Ferran es que puede jugar en posiciones diferentes. Ha jugado por la derecha, por la izquierda, como delantero y de diez también. Sé que durante las negociaciones, en verano, Pep habló con Ferran y le dijo que era posible que a veces jugara como delantero o falso nueve. Eso sorprendió a Ferran, porque no había jugado demasiado ahí, pero Pep estaba convencido de que podía jugar en esta posición. Pep quiere jugadores que trabajen por el equipo, y cuando Ferran no tiene el balón enseguida quiere recuperarlo. Esto es fundamental para Pep”, subraya el redactor.
“La de delantero no es mi posición natural, pero me siento cómodo. He marcado goles y esto es algo positivo. Cuando trabajas duro y haces sacrificios por el equipo, la recompensa llega. Sólo tengo que seguir trabajando duro y seguir intentando marcar goles”, afirmaba ayer en sala de prensa el jugador del equipo inglés. Sobre su potencial, el periodista destaca: “Futbolísticamente es súper rápido, y es impresionante cómo controla el balón también. En todos los partidos parece que no tiene miedo. Cuando tiene el balón siempre mira hacia delante.”
Mirando en esa dirección, el periodista de The Times agudiza el olfato. “Creo que puede llegar a ser uno de los mejores futbolistas del Manchester City si sigue aprendiendo. No tiene miedo a nada –repite-. Otra cosa importante para el desarrollo de Ferran es que Pep se queda hasta 2023. Tener a uno de los mejores entrenadores de la historia es algo muy bueno para Ferran.”
La espinita del de Foios hasta la fecha, la Premier League, donde aún no ha anotado. “Creo que ha tenido más éxito en la Champions porque ha sido titular más veces en comparación con la Premier. No creo que se trate de su condición física. Su primer partido fue contra el Burnley, un equipo súper físico, y marcó un gol allí. Para mí también jugó muy bien contra el Oporto, otro equipo físico. Tenía enfrente a Pepe, un hombre muy fuerte y con mucha experiencia, y Ferran jugó muy bien esa noche.”
“Hemos tenido lesiones entre los delanteros. Seguimos marcando goles, pero quizá no tantos como era habitual. Además, nos hemos enfrentado a rivales complicados, pero estamos trabajando duro para solucionarlo y estoy convencido de que los goles llegarán”, apuntaba ayer Ferran en el entorno Champions. De momento, donde que mejor está rindiendo y en el que hoy volverá a encarar la meta de José Sá en busca del gol.
Antes, se habrá desprendido de la cadena con un escudo del Valencia que su abuelo le regaló a su padre y su padre a él, y que luce siempre que no viste de corto. Porque hay sentimientos que nunca cambian, aunque celebres los goles con otra camiseta y en Inglaterra no seas “El xiquet de Foios”.
Imagen de cabecera: Laurence Griffiths/Getty Images
