En el último programa de ‘Estrellas a Escena’ pudimos contar con la presencia de Carolina Férez, centrocampista del Levante y una de las referentes de la Primera Iberdrola (14 años ya en la élite). Doble campeona de Liga en el Barça, una grave lesión de rodilla la dejó en el dique seco y frenó su progresión antes de fichar por el Valencia, donde volvió a disfrutar del fútbol y se convirtió en una de las jugadoras más queridas por la afición che. Cuando tuvo que salir junto a otras futbolistas clave del club, eligió el ilusionante proyecto del Levante. Pero los fantasmas del pasado volvieron en forma de rotura de ligamento cruzado.
“Es la segunda vez que paso por esta lesión y sí que es verdad que se hace mucho más dura que la primera. Porque es volver a lesionarte de lo mismo, volver a perderte una temporada, en la que además había tomado la decisión de fichar por el Levante… Y estaba en un momento muy bueno además”, explica la futbolista granota, que reapareció en pretemporada, en un amistoso ante el Villarreal. “En ese momento solo sentía agradecimiento. De poder volver a jugar al fútbol, estar con mis compañeras. haber vuelto a superar una lesión. Quien pasa esto sabe de lo que hablo. Es dura, solitaria, sufrida. Pero ahora valoro mucho más las cosas, disfrutando los minutos que me da el míster, sea de inicio o desde el banquillo. Siempre estoy currando, entreno como la que más. Estoy en un momento en el que quiero más, quiero llegar a mi nivel”.
Su momento más especial de lo que llevamos de curso fue en el encuentro directo ante la Real Sociedad, donde las granotas lograron romper la imbatibilidad donostiarra con un gol en el añadido. Fue de Carol Férez.
“Sentí tanta liberación que de hecho marco el gol, me rodean mis compañeras y me echo a llorar. Por tantas emociones juntas de meses atrás. Y encima es el gol que te da los tres puntos. Se te viene todo a la cabeza. Terminó el partido y no podía parar de llorar. Nos hicieron fotos después del partido y en todas salgo llorando. Pero de emoción, no hay tristeza ninguna. Es todo alegría”.
Su carrera ha dado un vuelco en los últimos años. Acostumbrada a ser importantísima en el Valencia, su extraña salida (como la de Maripaz Vilas), la pandemia y otra grave lesión han sido reveses difíciles de digerir.
“Dejar atrás al Valencia, que hacía seis temporadas que estaba allí. Ese paso fue complicado. Y en el Levante me veía bien, el equipo empezaba a arrancar, yo era cuando mejor estaba. Y de repente te das cuenta que tienes que pasar por quirófano. Yo nada más me lesiono en el campo del Santa Teresa, sabía que me había roto el cruzado. Y se te viene a la cabeza los siete meses, todas las fases. Y encima con el covid-19, que no puedes hacer nada. Ni tomarte un café. La gente no podía venir a casa por los contagios. Ha sido un año muy duro, pero sales de ahí y lo agradeces más todo”.
Un Levante peleón
A pesar de las numerosas bajas del Levante en el pasado mercado de fichajes, el equipo de Ángel Villacampa está firmando una gran temporada, situado en los primeros puestos y con grandes opciones de regresar a la Champions. “Plantilla de sobra tenemos para volver a entrar. Creo que en esta edición competimos muy bien con un grande como es el Lyon. Y en Liga nos hemos dejado puntos que no teníamos que habernos dejado, pero vamos a seguir luchando por ello. Estamos ahí cerca”.
Fue precisamente en la doble eliminatoria ante el conjunto galo donde se vio que este Levante no había perdido ni un ápice de competitividad. “Se decía que qué mala suerte porque al Levante le había tocado el Lyon, que lleva varios Champions ganadas. Pero salimos al Ciutat, pasaban los minutos… y pensaba, qué bien estábamos ante el que había sido campeón en los últimos años exceptuando el Barça. Para mí fue una eliminatoria ajustada, donde dimos nuestro máximo, supimos competir, y quedamos muy orgullosas con lo que hicimos”.
Se fueron Banini, Zornoza, Esther González… y el equipo no lo ha notado demasiado. “Se han ido jugadoras muy buenas, pero las que han llegado están muy bien. Pienso que tenemos una plantilla muy completa, hemos sabido salir al terreno de juego y dar lo que pide el míster. Hemos congeniado muy bien, fichajes y cuerpo técnico. Y ves al equipo plantar cara a todo un Lyon y te da una confianza para pensar en hacer grandes cosas”.
Las más jóvenes del Levante también llegan pisando fuerte. “Todas las jovencitas que tenemos en el equipo son muy buenas futbolistas. Fiamma tiene mucho potencial. Estela también. A Erika no la conocía, que venía de Gijón, y tiene cosas muy buenas, me ha sorprendido mucho. Y Gio sigue siendo joven, la vemos en el campo que parece que lleva muchos años jugando…Y Silvia también”. Mención aparte merece Gio Queiroz, cedida por el Barça, donde no jugó un solo minuto con el primer equipo en la máxima categoría. Su rendimiento ha sido inmediato. “Si es que Gio es una jugadora tremenda. Tiene un desparpajo, una velocidad… pero es joven, tiene una evolución por delante que si trabaja como lo hace, va a llegar a donde ella quiera. Ya la habéis visto, tiene cosas muy interesantes. Es muy difícil de coger a velocidad. Es muy complicada de defender. Y ahora le entran los goles. Tiene un margen de mejoría muy grande”.
El próximo encuentro del Levante es ante un Atlético que también lucha por estar en Champions. Un enfrentamiento que promete ser apasionante. “Es un duelo directísimo. Tanto ellas como nosotras tenemos las mismas ganas de llevarnos los tres puntos. Estamos en un momento bueno. Llegamos de ganar al Madrid CFF en casa haciendo un gran partido. Yo tengo ganas de ver al equipo contra el Atlético, que está en buen momento también. Confío muchísimo en mi equipo”.
Un equipo unido
El Levante ha sufrido más de una lesión grave en su plantilla. Carol Férez, Viola Calligaris y Eva Navarro la temporada pasada, María Valenzuela y María Méndez este curso… Sin embargo, hasta las que van con muletas son importantes dentro del vestuario.
“Yo fui la primera en la grada, la primera en el vestuario. Las restricciones del covid hizo las cosas más difíciles. Fue un año complicado, pero muy bonito a la vez. Porque cuando llegamos a la final de Copa sentí que formaba parte del equipo, porque siempre he sentido eso. Y eso te lo hace más ameno”.
Precisamente, una de las últimas bajas tiene que ver con María Alharilla, aunque en este caso por una buenísima razón: va a ser mamá. “Le dijimos que ahora íbamos a ser ‘titas’ todas (risas). Muy contentas, ella nos lo comentó antes de hacerlo oficial. Fue súper emocionante, porque no teníamos ni idea. Y tener en el equipo a una compañera que ha decidido ser futbolista y madre a la vez es increíble. Ella lo va a hacer y vamos a estar todas sus ‘titas’ para ayudarle en lo que sea. Pero ella viene todos los días, siempre está encima nuestro. Darle de nuevo la enhorabuena y decirle que estamos súper orgullosas de ella”.
Imagen de cabecera: Twitter Levante UD Femenino
Contenido patrocinado por Iberdrola
Alicante, 1991. Mi madre siempre me decía: "No sé por qué lloras por el fútbol, sino te da de comer". Desde entonces lucho por ser periodista deportivo, para vivir de mis pasiones (y llevarle un poco la contraria).
No te lo pierdas
-
Fútbol Internacional
20 Nov 2024Argentina reafirmó su liderato
Tras su último pinchazo ante Paraguay, Argentina se impuso por la mínima ante Perú...
Por Redacción -
Tenis
20 Nov 2024Gracias, Rafa
Todos rehusaban ese adiós, pero el paso del tiempo es algo inevitable y con...
Por Redacción -
Selección
19 Nov 2024El cierre perfecto
España ha concluido su andadura de 2024 con una nueva victoria en la última...
Por Redacción -
Motociclismo
18 Nov 2024Martinator: el juicio final
Tras la modificación del circuito para la última cita de MotoGP debido a las...
Por Redacción