El tenis español es, en general, de tierra batida. No se siente extraño en cemento o hierba, pero donde esté la arcilla, que se quite el resto. Y no hemos tenido que esperar ni una semana de la gira de tierra de primavera para ver tenistas nacionales destacando en los tres torneos con representación española: Marbella, Charleston y Bogotá. Incluyendo un título y récords de 17 años de vigencia.
Comencemos por lo de dentro. En el Club de Tenis Puente Romano de Marbella (Málaga) se ha estrenado un cuadro de categoría 250 con licencia para un año. Tras una previa marcada por las bajas de dos top10 a última hora (Zverev y Rublev), el torneo se presentaba con hasta 10 tenistas españoles en un cuadro con 28 raquetas.
Las dos primeras rondas nos dejaron unos cuartos de final con cuatro partidos con representación española y todas las opciones: desde unas semifinales completamente nacionales hasta una penúltima ronda sin tenistas españoles. Entre los dos extremos se dio el primero: Carreño a Kwon, Ramos a Gombos, Alcaraz a Ruud e Munar a Ivanska.
Pleno. Cuatro semifinalistas españoles. Tirando de hemeroteca, hay que viajar hasta 2004. En Valencia y también en tierra, para encontrar el último precedente de cuatro tenistas españoles copando las semifinales individuales de un torneo. En 2004 los protagonistas fueron Fernando Verdasco, Albert Montañés, Juan Carlos Ferrero y Alberto Martín. Por orden de campeón a semifinalistas. Entre medias una gran cantidad de torneos con tres de cuatro. Pero el pleno, 17 años después.
Desde 1990 han sido 24 ocasiones las que un país ha dominado las semifinales de un torneo ATP. 12 veces pleno estadounidense, 10 veces pleno español, y una vez argentino y francés. En 15 años (1990-2004) se repitió la situación 23 veces y han tenido que pasar 17 años para volver a ver esta situación.
Entre los cuatro semifinalistas, por primera vez en su carrera, Carlos Alcaraz. Con 17 años, primera semifinal al máximo nivel. Con 17 años, el semifinalista más joven ATP desde Alexander Zverev en 2014 (Hamburgo) y semifinalista español más joven a nivel ATP desde Rafael Nadal en 2004 (Auckland). Un paso más.
Carreño y Munar protagonizaron una final donde el asturiano buscaba su quinto título y el balear estrenar su palmarés en su primera final. En tres sets, Pablo Carreño hizo buena su condición de primer favorito para elevarse a pentacampeón ATP en ocho finales. Munar se ha ido de Marbella con su primera final ATP y fortaleciendo su presencia en el top100 (81).
Saliendo del histórico (por su disputa y por las semifinales) torneo en Puente Romano, el gran rendimiento del tenis español ha traspasado fronteras. En Charleston (Carolina del Sur, EEUU) la WTA abría la temporada de tierra en color verde. Con Garbiñe Muguruza y Paula Badosa como representantes españolas, la hispano-venezolana tuvo que retirarse en octavos ante Putintseva por lesión cuando estaba a cuatro juegos de ganar.
Para Paula Badosa el torneo ha supuesto varios avances. Tras dejarse sendos sets en sus dos primeros compromisos, superó fácilmente a la estadounidense McNally para citarse en cuartos ante una de las principales raquetas del circuito y la actual raqueta que lidera la WTA: Ashleigh Barty. En un partido con muchas alternativas, Badosa se llevó el primer set tras tres roturas donde la española supo imponerse en el intercambio de golpes.
La segunda manga fue si cabe más abierta. Nueve juegos y cuatro roturas. Para empezar en los dos primeros juegos. Llegados al 3-3, Badosa fue por el camino más difícil: le rompió el saque a Barty en servicios consecutivos para cerrar el partido en dos sets (6-4 6-3) y cerrar su primera victoria ante una tenista del top10 (1-3) y la primera también ante primera raqueta del mundo. En sus cuartas semifinales WTA, las primeras en un torneo de categoría 500, la tenista entrenada por Javier Martí, cedió ante Veronica Kudermetova, pero sale de Charleston con su mejor clasificación (62) y todo lo que implica un triunfo ante la primera tenista de la clasificación y primera victoria top10.
El último foco de la semana para el tenis español lo encontramos en Bogotá (Colombia), en el segundo torneo WTA de la semana. En el torneo colombiano, Lara Arruabarrena y Nuria Parrizas han tenido su momento. La tolosarra, en un torneo donde es campeona y doble finalista, ha vuelto a unos cuartos de final WTA ocho meses después.
Para Nuria Párrizas-Díaz, Bogotá y Colombia estarán en su historia tenística de por vida. Ha sido el primer torneo en que la granadina ha disputado unos cuartos de final WTA. Cedió en la antepenúltima ronda en Bogotá, pero este lunes aparece en su mejor posición (157) como recompensa a un inicio de año donde ha ganado tres de los últimos cinco torneos ITF que ha jugado.
Marbella, Charleston, Bogotá, Carreño, Ramos, Munar, Alcaraz, Badosa, Arruabarrena y Párrizas. Para ser la primera semana de temporada de tierra, el tenis español ha sido muy protagonista en el momento en que el tenis se mancha los calcetines.
Imagen de cabecera: ImagoImages
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