Corría el mes de Abril del año 2013 cuando el AEK de Atenas certificó su dramático descenso a la Beta Ethniki (Segunda División del fútbol griego). Se trataba del primer descenso en la historia de este club fundado en 1924 por refugiados de la Guerra Greco-Turca, algo que no sentó nada bien a sus hinchas más radicales, que provocaron incidentes violentos al ver como uno de los equipos más exitosos del panorama heleno abandonaba la élite griega.
Sin embargo, cuando parecía que ya nada podía ir a peor, el AEK se declaró insolvente, asumió los graves problemas financieros en los que estaba envuelto, e informó a la Federación de que no jugarían en Segunda, decisión que les hizo descender una categoría más (a Gamma Ethniki) liberándoles de sus deudas. Tocaba empezar de nuevo, desde una categoría amateur con el regreso de Dimitris Melissanidis a la presidencia del club y con la continuidad de Traianos Dellas como entrenador.
El debut en la Tercera División de Grecia en la temporada 2013/14 fue todo un éxito. Al finalizar la temporada se coronaron Campeones del Grupo 6 con un récord de 23 victorias, 3 empates y tan sólo una derrota. El Águila Bicéfalo daba su primer gran paso en su retorno a la élite, jugaría en Segunda con el objetivo de ascender a la Super Liga y volver a pelear con los grandes. Y vaya si cumplieron su objetivo.
En la liga regular 2014/15 finalizaron en primera posición, acumulando 2 empates y ninguna derrota. Nuevamente establecían un récord, uno que les daría opción a jugar los Play-Off de ascenso, en los que saldrían campeones acumulando una sola derrota en el partido de apertura contra el Iraklis. Lo habían conseguido: dos ascensos en dos años para retornar al lugar dónde tantos éxitos cosecharon, todo con Dellas dando órdenes en el banquillo. De villano a héroe.
Sin embargo, tras una derrota por 4-0 contra el Olympiakos en el inicio de la temporada 2015/16 de la Super Liga y diferencias con la directiva, el AEK decidió relevar de sus funciones a Traianos Dellas, nombrando a Stelios Manolas entrenador interino hasta que se decidió contratar a Gustavo Poyet nueve días más tarde. A los mandos del técnico uruguayo, el equipo aurinegro ha logrado que su vuelta a la categoría reina haya sido por todo lo alto. Y es que el equipo, pese a las dificultades para luchar por la liga con el Olympiakos campeón, finalizará el campeonato en el Top 3 (en segunda o tercera posición), además de haber logrado proclamarse campeón de la Copa de Grecia con su victoria por 1-2 frente a, precisamente, los campeones de la Super Liga.
Se trata del 15º título copero del AEK, que lo sitúa a 3 del Panathinaikos, título que no pertenece del todo a Poyet, pues el técnico fue despedido hace algunos días por no querer renovar su contrato (entrenará al Real Betis), asumiendo las riendas del equipo Stelios Manolas para lo que resta de temporada. Una fantástica campaña que puede poner el broche con la clasificación para la tercera ronda preliminar de la UEFA Champions League, pues del 2º al 5º clasificado en liga, se juega un Play-Off que otorga tal premio. En caso contrario, el equipo ateniense jugará la Europa League. Sea como sea, el Águila Bicéfalo está de vuelta.