El pasado domingo, día 1 de mayo, la afición blaugrana volvió a sonreír. Ansu Fati jugó otra vez un partido oficial con el FC Barcelona, 102 días después de su última lesión.
El canterano es la mayor esperanza de la parroquia catalana, además de ser la piedra angular sobre la que, tanto Xavi Hernández, como el club, quieren reconstruir el equipo de cara la próxima temporada.
Ansu Fati ha mostrado ser un jugador diferencial en el último tercio del campo, capaz de aportar un sinfín de posibilidades al conjunto culé. No obstante, una de las más sorprendentes habilidades que tiene es su capacidad goleadora.
Desde su debut allá por el 2019, el actual número 10 azulgrana siempre ha mostrado un perfecto idilio con el gol. Ansu, sin ser un 9 al uso, domina a la perfección distintos fundamentos individuales de delantero como: “Priorizar la fijación a la potencia”, o “de primeras asegurando un buen contacto”. Gracias a ello, se ha convertido en un magnífico goleador y una solución para su equipo delante bloques defensivos muy bajos.
Otra de las habilidades más destacadas del internacional español es su capacidad de asistir a sus compañeros. Partiendo normalmente desde el sector izquierdo, el 10 blaugrana identifica perfectamente cuando hay un compañero en una posición de ventaja con respecto a su par directo, para posteriormente realizarle un pase o un centro, para que este pueda finalizar con éxito. Asimismo, una de las facetas que más destaca en su habilidad en el pase, es la perfecta adecuación del timing entre el pase y el desmarque del receptor.
Por último, otra de las grandes capacidades del jugador blaugrana es su habilidad en el 1vs1. Gracias a su desequilibrio en este tipo de situaciones, el canterano genera que los equipos rivales decidan marcarle con más de un jugador defensor, consiguiendo así generar situaciones de ventaja espacial en otras zonas del terreno de juego que pueden ser aprovechadas por sus compañeros.
En conclusión, la vuelta de Ansu Fati es una alegría para el mundo del fútbol. Ahora sólo queda por ver si le respetan las lesiones, y si puede volver a ser el gran jugador que apuntaba a ser. Si es así, de buen seguro que traerá mucho éxito al FC Barcelona, y también a la Selección Española en el próximo mundial de Qatar 2022.