Si ya antes era prácticamente una gesta histórica, ahora ya sí es prácticamente posible, aunque las matemáticas todavía digan lo contrario. Con la derrota de ayer, el Barça dice su definitivo adiós a las remotas posibilidades que tenía de pelear por la liga y, a falta de 18 puntos por disputarse, el Real Madrid tan solo necesita 7 para ser matemáticamente campeón.
El Barça cayó en casa ante el Cádiz (0-1) que, en su lucha, da un paso de gigante al sumar estos tres puntos. Antes del partido ocupaban la 18º plaza, la que marca el descenso. Tras sumar en el Camp Nou, suben hasta la 16º superando a Mallorca y Granada, ambos con 29 puntos. El equipo amarillo es uno de los que mejores sensaciones transmite de los involucrados en la pelea por mantener la categoría y, sobre el papel, no debería tener problemas para salvarse pues, partiendo desde la mejora en el juego, dan pie a confiar en ellos. Anoche, Ledesma estuvo enorme en portería. Con su estilo particular dado al espectáculo, terminó realizando 6 paradas, 3 de ellas desde dentro del área.
El Barcelona encaraba este partido con la intención de redimirse tras la eliminación de la Europa League del pasado jueves pero, al igual que la grada de animación, el espíritu pareció estar ausente en los jugadores. Lo más destacable fue el gran partido de Ousmane Dembélé, que lo intentó por todos los medios y haciendo de todo. Veremos si termina quedándose en Barcelona, sería una gran noticia para los culés.
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