Aún no ha terminado la Bundesliga y ya se conocen los nombres de los técnicos que ocuparán los banquillos en los clubes más importantes de la competición. Algunos, incluso, se saben desde hace meses y otros están en el aire. Nuevos nombres, cambio de ideas, nuevos objetivos… Todo cambia. Toca ver cuáles son esos movimientos que ya se han anunciado, además de los que faltan por producirse o están incluidos en algunos rumores.
Para empezar, no se libra ni el Bayern. Los bávaros vienen de ganar el sextete y este año suman una nueva liga, pero en DFB Pokal y Champions fueron eliminados. Primero llegó la sorpresa copera ante el Holstein Kiel de 2.Bundesliga y, meses más tarde, la venganza de Neymar y Mbappé en la máxima competición continental. Flick no estaba contento con la inmersión del club en el mercado de fichajes y chocó con Hasan Salihamidzic, el director deportivo. En una rueda de prensa, tras un partido liguero y tras haber hablado con la plantilla, ‘Hansi’ anunció que quería salir del club, a pesar de quedarle aún dos años más de contrato. Se volvió a activar así la opción de la selección alemana. Cuando Joachim Löw anunció que no seguiría después de la Eurocopa, los nombres de Klopp, Flick o Nagelsmann salieron a la luz y todos lo negaron, pero la situación cambió.
¿Y quién ocupará el puesto de Flick en Múnich? Ya se hizo oficial. Un bávaro será el relevo. Julian Nagelsmann se convirtió en el técnico más caro de la historia al tener que pagar un traspaso de 25 millones de euros por el actual entrenador del RB Leipzig. Un fichaje que levantó muchas opiniones contrarias en el fútbol germano, por la repercusión que iba a tener en una época como la que estamos viviendo. Quedaba así libre el banquillo del club de la bebida energética y ellos lo tenían claro. Para cubrir la baja de Nagelsmann, el adecuado era Jesse Marsch, que en unos años ha pasado por las tres franquicias del entramado Red Bull. De Nueva York a Leipzig, pasando por Salzburgo. Pero Marsch no se estrena en Alemania, porque tuvo un paso fugaz por el club, siendo segundo entrenador. Un alemán, Matthias Jaissle, será el siguiente inquilino en el banquillo de Salzburgo, un puesto que podía haber ocupado Bo Svensson si el Mainz 05 no le hubiera requerido a principios de año.
El cambio que se anunció con mayor antelación fue el de Marco Rose. El técnico del Borussia Mönchengladbach comunicó su futura salida e, inmediatamente, se conoció su siguiente destino, el Borussia Dortmund. La afición se tomó muy mal el anuncio y pidió el despido inmediato del técnico, pero la cúpula decidió mantenerle y acabar la temporada. El problema llegó después. Los Potros se vieron sumidos en una crisis en la que sumaron ocho derrotas y un empate justo después de Rose haber comunicado su marcha. Luego enderezaron el rumbo, para llegar con opciones de clasificar a Europa. ¿Quién será el próximo técnico del Gladbach? Eso también se hizo oficial. Adi Hütter tiene en sus manos el reto de dejar al Eintracht Frankfurt en Champions y, en verano, pasará a ser el local en el Borussia Park. El movimiento de Hütter también fue algo polémico para algunos, puesto que unas semanas atrás había asegurado que no saldría.
Otro club con el puesto del técnico en el aire es el Leverkusen. De momento está Hannes Wolf y tiene opciones de continuar en el cargo. Sin embargo, ha surgido la posibilidad de que llegue otro en su lugar y ahí han salido a la palestra los nombres de Oliver Glasner o Gerardo Seoane. El austriaco está cerca de clasificar al Wolfsburg a la Champions, pero un roce con Jörg Schmadtke podría alejarle del Volkswagen Arena al final de la actual campaña. Seoane, por su parte, también lleva tiempo sonando para un club de la Bundesliga y, tarde o temprano, el suizo de ascendencia española que dirige al BSC Young Boys, acabará en el fútbol germano.
Alemania es un país particular en ese aspecto. Mientras no suele darse en otras ligas hasta que acabe la competición, en la Bundesliga es más habitual ver estos anuncios, tanto de jugadores, como de entrenadores. Y no solo de aquellos que acaban contrato y pueden negociar durante los últimos seis meses, sino de los que tienen contrato en vigor, como ocurrió meses atrás con el anuncio de la futura llegada de Dayot Upamecano al Bayern. Esa es una particularidad germana como fue hace años común en Italia el cambio de jugadores entre Inter, AC Milan y Juventus. Todo se puede llevar con la mayor normalidad posible. Así es el mercado. Así es el fútbol.
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