El Real Madrid vuelve a enfrentarse, como ya lo hizo la campaña anterior, al Atlético de Madrid a domicilio. Ciertas dudas de juego y el contexto en el que se enfrentan son un motivo extra para estar pendientes este fin de semana del derbi madrileño. El equipo blanco podrá mantener ese colchón de puntos sobre sus perseguidores, o bien «permitirá» acercecársele y hacer de nuevo de la Liga una competición a éstos.
En el caso del técnico anterior, Rafa Benítez, el resultado obtenido, el empate, tuvo consecuencias que se fueron agravando con otras siguientes derrotas. La sanción que sufrió el equipo en la Copa de Rey empeoró si cabe la situación del anterior preparador hasta el punto de no poder cambiarla y ser cesado. Este año, Zidane, a pesar de no tener ninguna derrota ha tenido algún empate que ha sentado como si fuera un partido perdido. Veremos si es capaz de demostrar en este partido si no se repite la historia.
Rafa Benítez llegó en unas circunstancias en las que se decía que todos los jugadores querían la continuidad del anterior técnico, Carlo Ancelotti. Un entrenador completamente opuesto en el trato de jugadores y, si se tiene que hablar de éxitos, con un mayor número que el español. Sin embargo en su presentación a mucha gente le tocó la fibra con las lágrimas de emoción al volver a su casa, el club blanco.
Ciertos actos realizados en la pretemporada y el comienzo de la temporada no fueron bien vistos por parte de la prensa. A pesar de ello, en los ocho encuentros disputados previamente al partido del Calderón, el Real Madrid jugó seis partidos de Liga y dos de Copa de Europa. Cuatro de liga y los de copa europea con victoria y dos empates a cero. El resultado del derbi fue un empate a uno con goles en el 9 de Karim Benzema y en los últimos diez empató Vietto para los colchoneros.
Comenzaba una duda dentro del madridismo, en el que incluso se hablaba de malestar en la plantilla. La goleada posterior sufrida ante el Barcelona, hería de muerte a Rafa Benítez como técnico madridista, y ya la eliminación de Copa del Rey por alineación indebida hacía pensar que tenía los días contados como míster blanco. Su último partido casualmente tuvo lugar enfrentándose al equipo de la Liga donde comenzó su reputación nacional e internacional, el Valencia. Empate y cesado poniendo al entonces entrenador del Castilla, Zinedine Zidane.
El bagaje de resultados fue un partido de Copa, perdido por la sanción; 13 victorias, tres empates (Sporting, Málaga y Valencia) y tres derrotas (Barcelona, Sevilla, Villarreal) en Liga; y en la Champions, cinco victorias y un empate.
La llegada de Zidane fue recibida como un soplo de aire fresco, con dos victorias y un empate sus primeros encuentros. Al final de la temporada obtuvo la ansiada Champions y quedó subcampeón a un punto del Barcelona. Su bagaje en Liga fue 17 victorias, dos empates y una derrota, mientras que en Copa de Europa cinco victorias (contando con la obtenida en la final por penaltis y posterior nombramiento Campeón de Europa), un empate y una derrota.
Durante la pretemporada hubo dudas con algunos nombres propios, entre los que estaban James Rodríguez y su posible venta. Comenzaron la campaña de forma inmejorable, con una victoria sobre el Sevilla por 3-2 en la Supercopa de Europa. Buena forma llegar a la Liga. Hasta el momento llevan disputados 15 encuentros sin sufrir una derrota: 10 victorias y cinco empates. Sin embargo los empates tuvieron lugar ante equipos entre los que se encuentran Eibar, Legia y Borussia. Partidos en los que ‘a priori’ y durante el partido se vieron mucho mejores y no mantuvieron la intensidad.
Llega una prueba de fuego, esta vez en la 12ª jornada de Liga. Será el momento en el que el equipo deberá superar su primera prueba importante de la temporada. Veremos con qué resultado.