No es nada nuevo realzar el rendimiento ofrecido por los futbolistas del BVB en los últimos años. En todas sus líneas, el conjunto que hasta final de temporada dirigirá Jürgen Klopp, ha conseguido presentar un fútbol destacable en el viejo continente. Pero donde el motor suena con más potencia es en la medular del Signal Iduna Park. El corazón de este equipo ha latido con fuerza en el centro de la formación aurinegra. Cuando hubo desierto en Dortmund, la vegetación y el agua, la flora y la vida, surgió a modo de oasis invasor del vació arenal que rezumaba en el club hace algo más de una década.
La pareja de centrales de los de la cuenca del Ruhr cambió poco o nada desde el nuevo resurgir del club. El liderazgo de Mario Götze tuvo un más que digno sucesor en Marco Reus. Los ‘secundarios’ de Jürgen siempre estuvieron a la altura. Lucas Barrios fue superado por su heredero Robert Lewandowski tras la salida del paraguayo destino a China. La búsqueda de un nuevo DC es otra historia. Pero el centro del campo aurinegro siempre gozó de una estabilidad especial dentro del ajetreo. La salida de Nuri Sahin al Real Madrid fue la primera de las ventas del Borussia Dortmund dentro de su renovación como club. Lo que vendría después sería una incógnita. Pero Klopp y los suyos se supieron restablecer e incluso la solución, mejoró el problema. Gündogan llegaba para hacer olvidar al que durante unos años, había contribuido al renacer del BVB. Pero un nuevo contratiempo llegaría al centro del campo aurinegro. Ilkay se lesionó de gravedad cuando vivía su mejor momento y el destino -o Zorc y Klopp- quiso ser justo y devolvió al anterior dueño de la medular al club en el que mejor rindió. Sahin sería ahora la solución.
Mientras Nuri e Ilkay se llevaban los elogios por el juego desplegado por los de Kloppo, sus escoltas sostenían el nivel exigido para aportar el equilibrio justo al equipo. Hablo de Sven Bender y Sebastian Kehl. Un cuarteto que combinados de diferentes formas, conforman un centro del campo sólido y con diferentes recursos según las necesidades del míster.
Movimientos obligados, fin de ciclo confirmado
La salida de Klopp y la llegada de Thomas Tuchel dejará varios cambios en las formas y en el fondo del nuevo Dortmund. En el caso del centro del campo aurinegro, la alteración será obligada. El líder y capitán Sebastian Kehl abandonará el club tras más de 13 años para retirarse del fútbol. Milos Jojic no ha resultado ser el jugador que se buscaba y probablemente, saldrá cedido reclamando minutos y adquiriendo experiencia. Gündogan acaba contrato en 2016 y el club ya ha manifestado que no renovará, por lo que tampoco se descarta una posible salida en el próximo mercado, aportando algún beneficio económico en las arcas del club. Sahin no termina de encadenar partidos desde su llegada sobre todo por constantes lesiones, y Sven Bender parece necesitar un complemento para que su figura brille.
Los nombres que suenan para el nuevo proyecto
Son muchos los jugadores que empiezan a salir para reforzar la sala de máquinas del Dortmund. Tuchel ya trabaja en la búsqueda del jugador que mueva al equipo tal y como el ex-técnico del Mainz 05 pretende. El mercado belga ofrece jugadores jóvenes con mucha proyección como Dennis Praet o Youri Tielemans, aunque su rendimiento en una gran liga y con la exigencia de un club como el BVB puede ser una incógnita. En Alemania, las opciones pasan por 2 jugadores del Bayer 04 Leverkusen y sobre todo, por una de las revelaciones del actual campeonato. Gonzalo Castro podría salir del club de las aspirinas pero hay dudas de que sea el hombre clave para el centro del campo aunque eso sí, podría funcionar a la perfección como el futbolista de complemento cuya polivalencia se convierte en esencial para cualquier entrenador. Lars Bender es otro de los nombres que han sonado. Jugar con los 2 gemelos podría ser motivante y la productividad del hermano de Sven en los últimos meses ha sido más que sobresaliente. El último nombre, y quizás el que suena con más fuerza, es el de Johannes Geis. Con 21 años, el pivote del Mainz 05 encarna el perfil idóneo que busca Tuchel. Juventud y capacidad para liderar un centro del campo desde el primer minuto, conocedor de la competición y en constante aprendizaje para mejorar en cada partido.
El BVB vivirá un proceso de regeneración que pretende ser lo más plácido posible con un técnico similar al que en los últimos años les ha devuelto a la élite del panorama futbolístico. El centro del campo está obligado a renovarse por diferentes circunstancias. Dar en la tecla en la búsqueda del nuevo creador de juego será lo que determine el grado de suavidad de dicha transición. Los brotes siguen estando presentes en el desierto. El oasis puede volver a dominar en tierra hostil.
