Treinta y cuatro años después del título de su padre Keke, Nico Rosberg se consagró hoy campeón de la Fórmula 1 por primera vez. Sin embargo, no es la primera ocasión que una misma familia posee dos ganadores de la máxima categoría del motor.
El antecedente corresponde al británico Graham Hill, campeón en 1962 y 1968, y su hijo Damon, que lo emuló en 1996, también 34 años después de la victoria inicial de su padre.
El australiano Jack Brabham y el brasileño Nelson Piquet, ganador cada uno de tres títulos de la Fórmula 1, también tuvieron hijos en la máxima categoría. Pero ni David y Gary Brabham ni Nelsinho Piquet lograron los mismos éxitos.
Damon Hill | Getty
La misma situación se dio con el ítalo-americano Mario Andretti, campeón en 1978, con su hijo Michael, que compitió para McLaren en 1993
El caso inverso se dio con los canadienses Gilles y Jacques Villeneuve, donde el campeón del mundo fue el hijo. El padre Gilles falleció en 1982 cuando peleaba el título del mundo, mientras que el hijo Jacques logró el título en 1997.
Keke Rosberg, quien es finlandés y fue campeón con Williams, no siguió el triunfo de su hijo alemán en directo y prefirió seguirlo con tranquilidad por televisión.
«Estoy muy orgulloso. He logrado lo mismo que mi padre. Él estará aquí en media hora, así que estoy muy entusiasmado de verlo», señaló hoy el nuevo campeón mundial.