El Allianz Arena es un estadio que definitivamente le sienta bien a Cristiano Ronaldo, que hoy volvió a celebrar un doblete decisivo en el campo del Bayern Múnich para llegar a los 100 tantos en competiciones europeas.
La temporada del portugués no venía siendo la más brillante y las críticas a la «BBC» que integra junto a Karim Benzema y Gareth Bale venían en ascenso en las últimas semanas. Sin embargo, el artillero del Real Madrid apareció en el momento más importante en lo que va de temporada para dar vuelta un partido que venía muy complicado para los blancos y conseguir un 1-2 que deja a su equipo a un paso de otra semifinal de Champions League.
«¿Quién dudaba de mí? A mí esas dudas no me llegan. Tienes que pasarme quienes tienen esas dudas. La gente que me sigue, la gente a la que le gusta Cristiano, está siempre apoyándome. Así que yo me quedo con eso», dijo Cristiano en la zona mixta del Allianz Arena.
Al igual que hace tres años, cuando los blancos lograron una histórica victoria por 0-4 en Múnich para sentenciar su pase a la final de la Champions, el atacante portugués se despachó con un doblete para enmudecer a los casi 70.000 hinchas bávaros.
Con su doblete, Cristiano es el primer jugador que llega a los 100 tantos en Europa, de los cuales 97 corresponden a las Champions. Y lo hizo en 143 partidos, un promedio que asusta.
«Estoy muy contento. Es un récord que quería alcanzar. Ser el primer jugador en alcanzar los 100 goles en competiciones europeas para mí es un honor y ademas contra uno de los mejores equipos del mundo, como es el Bayern», comentó Cristiano.
Lo sigue Lionel Messi con 97, aunque el argentino, al borde de la eliminación con el Barcelona, tal vez no tenga muchas posibilidades de seguir sumando esta temporada.
El primer tanto europeo de Cristiano fue el 10 de abril del 2007, en la goleada por 7-1 del Manchester United ante la Roma. Diez años y dos días después, se convirtió en centenario. Pero lo más llamativo es que sus segundos 50 goles llegaron en apenas 47 partidos, lo que da muestra de su evolución pese a sus 32 años.
El astro luso estuvo algo apagado en el primer tiempo hoy en el Allianz ante un Bayern que pudo haberse ido 2-0 al descanso si Arturo Vidal no hubiera fallado un decisivo penal en el cierre de la primera etapa. «El fútbol es así. A lo mejor, si hubieran marcado el gol el partido era para el Bayern. Pero el fútbol es una caja de sorpresas y en cinco minutos puede cambiar», reflexionó.
En el complemento, el portugués apareció en todo su esplendor. Primero conectó una muy buena volea a los 46 minutos tras un centro de Daniel Carvajal y luego definió a los 77 minutos entre las piernas de Manuel Neuer tras pase de Marco Asensio. Con esas dos intervenciones, el Balón de Oro del 2016 demostró, como dijo en la víspera su técnico Zinedine Zidane sobre la BBC, que mientras más se lo critica mejor rinde.
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