Jorge AMORÓS – El Getafe ha adelantado la contratación de Cosmin Contra como entrenador, prevista para el próximo verano. Una racha de 12 partidos consecutivos sin ganar ha precipitado el despido de Luis García Plaza. Tras 27 jornadas el Getafe es junto al Real Betis -colista- el equipo que menos goles ha marcado en la categoría (23) y se ha quedado con su tanteador a cero en 14 encuentros. El colapso ofensivo y la situación clasificatoria alarmante contrastan con las expectativas del comienzo de temporada y el potencial de la plantilla. La llegada de Contra pretende ser un revulsivo en el juego y llenar de identidad al club del extrarradio madrileño.
Cosmin Contra fue un lateral derecho ofensivo y enérgico 73 veces internacional con Rumanía, y militó en el Getafe durante la época dorada del club entre 2005 y 2010. A su condición de ídolo local añade ahora la de ser el primer ex jugador en dirigir al equipo y el primer entrenador rumano en la máxima categoría del fútbol español. Contra ha firmado un contrato hasta verano de 2016.
16 MESES EN EL PETROLUL COMO REFEENCIA
Cosmin Contra ha tenido éxito con el Petrolul Ploiesti en el fútbol de Rumanía, un campeonato especialmente volátil para los entrenadores que en muchas ocasiones duran semanas o meses. Un dato es revelador: con la salida de Cosmin Contra, en esta Liga I ya se han producido 22 cambios de entrenador en 22 jornadas.
Tras iniciarse como entrenador con el juvenil del Getafe y el Fuenlabrada (2ªB), Contra se hizo cargo del Petrolul Ploiesti a finales de noviembre de 2012. La pasada temporada consiguió terminar tercero en liga y conquistó la Copa de Rumanía, la tercera en la historia del club. En esta 2013/14 Contra deja al Petrolul por encima de las expectativas, como inesperado candidato al título en una casi imposible persecución del Steaua y en las semifinales de la Copa de Rumanía. El balance de Contra con el Petrolul en todas las competiciones es de 33 victorias, 20 empates y 5 derrotas. Registros que se ponen en valor al considerar las numerosas salidas de jugadores titulares.
Cosmin Contra y Laurentiu Reghecampf (Steaua Bucarest) han acaparado el protagonismo entre los banquillos de La Liga I en los dos últimos años. Ambos de 38 años, representan a una nueva generación de entrenadores identificados con los pantalones vaqueros, torsos cargados y una actitud sobreactuada: Reghecampf arenga a sus jugadores reunidos en corro sobre el terreno de juego después de los partidos, y a Contra le hemos visto golpearse la cabeza con una silla del Arena Nationala (ver foto). Ponen el énfasis en la motivación y en la preparación física.
Cosmin Contra durante la Supercopa rumana de 2013 | ProTV
Tácticamente el esquema por defecto del Petrolul de Cosmin Contra era el 4-2-3-1 con un estilo de ataques rápidos y verticales. Alternaba combinaciones cortas terminadas con disparos desde la mediapunta para no perder el orden defensivo y acciones algo más prolongadas en las que se incorporaban los mediocentros y los laterales. Nunca renunciaba a ir al ataque, incluso ante rivales superiores o en inferioridad numérica.
GETAFE, IDENTIDAD Y VACÍO
El Getafe completa con esta su décima temporada en Primera División. Fundado en 1983, tras la adquisición por parte de Ángel Torres en 2002 el club del extrarradio madrileño ascendió por primera vez en 2003 y se ha consolidado como un media-tabla de La Liga. Durante esta década el Getafe se ha caracterizado por promocionar a entrenadores jóvenes: Quique Flores, Laudrup, Míchel; y por ser un club autodefinido como ‘vendedor’. La proximidad y las buenas relaciones de Ángel Torres le han permitido incorporar a jugadores descartados por Real Madrid y Atlético de Madrid, generando una capacidad salarial superior al promedio de clubes de la Primera División con la que atrae a jugadores libres de contrato. Este modelo mercantilista ha convertido al Getafe en club estable pero aún sin tradición ni símbolos y paradigmático del desarraigo. El vacío en las gradas del Coliseum Alfonso Pérez escenifica cada dos semanas la falta de reclamo y atractivo para los seguidores, disuadidos también por los precios elevados de las entradas, la televisación total del campeonato español y un estilo de juego excesivamente resultadista en la etapa de Luis García Plaza. En palabras de Ángel Torres “el Getafe aburría hasta las ovejas”.
La contratación de Cosmin Contra supone un cambio en los parámetros de este Getafe: su apuesta por el fútbol ofensivo y su condición de ex jugador suponen un atractivo para los seguidores. El propio Contra ha invocado a los aficionados en su presentación: “Me gustaría llenar el Coliseum ya el viernes [contra el Granada…]. El carácter que tengo yo va a ser suficiente para todo el mundo, van a coger de mi carácter […] Como entrenador solo puedo prometer que va a haber un equipo con ganas y que va a salir al campo a darlo todo”.
La presencia de Cosmin Contra predispone al Getafe a la incorporación de jugadores del campeonato rumano, un mercado poco recurrido en la actualidad por los clubes de Europa Occidental y repleto de jugadores muy asequibles que por calidad técnica, estilo de juego y cultura son particularmente adaptables al fútbol español.
Energía, carácter e identidad: Cosmin Contra vuelve al Getafe para rellenar muchos vacios.
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