El Chelsea cuenta en sus alturas con uno de los propietarios multimillonarios más mediáticos del fútbol europeo y mundial. La figura de Roman Abramovich supuso un antes y un después en la historia del club londinense, y del fútbol en general, cuando se hizo con el control económico.
Siempre se ha relacionado a este tipo de empresarios dorados a nivel económico con el derroche, con suculentas ofertas de dinero que pocos clubes se resisten a aceptar. Sin embargo, en el caso del Chelsea, a la hora de vender, se está presentando una situación interesante, que refleja la seriedad institucional del actual líder de la Premier League.
La puerta de salida del Bridge ha visto como jugadores importantes de la primera plantilla Blue han hecho las maletas con destino otros clubes, dejando atrás su etapa en el Chelsea. Sin embargo, ninguno de ellos han salido fácil, ni con precios regalados, provocando que el equipo se quedara sin jugadores relevantes, pero con las arcas un poco más llenas (por si hiciera falta al amigo Roman).
El último futbolista importante, a nivel deportivo, en salir rumbo a otro equipo ha sido el alemán André Schürrle, quien deja el Chelsea para fichar por el Wolfsburgo. Así, jugará de nuevo en su país, justo meses después de coronarse campeón del mundo en Brasil 2014.
Una salida que se une a una más que interesante lista de futbolistas que han dejado grandes cifras económicas en las cuentas del club londinense. Algunas de las más significativas que se han producido en las dos últimas temporadas son los siguientes:
– David Luiz · PSG · 49,50 millones €
– Juan Mata · Manchester United · 44,73 millones €.
– Romelu Lukaku · Everton · 35,36 millones €.
– André Schürrle · Wolfsburg · 32,00 millones €.
– Kevin De Bruyne · Wolfsburg · 22,00 millones €
Este es el TOP 5 de salidas que se han producido los últimos dos años en las filas del Chelsea. Cinco traspasos que han dejado en las arcas la suculenta cifra de 183,59 millones de euros. Y a simple vista, sólo David Luiz era vital, titular con el conjunto Blue. Evidentemente, jugadores como Juan Mata, Schürrle o De Bruyne se encuentran entre el primer y el segundo escalón mediático a nivel mundial, pero en el momento de producirse sus respectivas salidas no eran titulares, como por ejemplo el caso del último en tomar la puerta de salida, Schürrle.
Sin duda alguna, se producen salidas de jugadores relevantes, pero que posteriormente no afecta al rendimiento del equipo. Esta misma temporada han jugadores que tuvieron muchos minutos la pasada campaña con Mourinho, como fueron David Luiz o ahora Schürrle, pero el club londinense es líder de la Premier League, se ha clasificado para los Octavos de Final de la Liga de Campeones y es finalista de la Capital One. Unas bajas que no han afectado seriamente al rendimiento, ya que el club ha sabido renovarse de la mejor manera, tras sus salidas.
Un lavado de cara que no ha supuesto resultados negativos para el club, ni en el ámbito deportivo ni en el económico. La salida de jugadores como Mata, De Bruyne, David Luiz, Lukaku, Demba Ba, Fernando Torres y ahora Schürrle se ha repuesto con la llegada de otros como Nemanja Matic, Cesc Fàbregas, Remy, Didier Drogba, Filipe Luis y Cuadrado. Y los resultados a nivel económico muestran cifras favorables a sus arcas.
Es decir, el Chelsea se ha repuesto bien a salidas aparentemente importantes, de jugadores que eran en gran mayoría suplentes pese a su estatus mediático, con grandes cifas, para fichar luego jugadores de peso que se han adaptado a la perfección, obteniendo buenos resultados deportivos y, además, dejando un balance económico de Ingresos-Ventas favorable a sus arcas.
La relación Abramovic-Mourinho en el aspecto deportivo y económico del Chelsea sigue escribiendo páginas brillantes, y las últimas operaciones en el mercado de fichajes son un claro ejemplo. Tener un propietario solvente, de más, en los mandos del club no se traduce en malgastos, en operaciones infladas con el afán de conseguir objetivos. Un club rico que controla y maneja las situaciones, y que sigue convirtiéndose, junto a otros, en un ejemplo de rendimiento.