Catastrófico el inicio de temporada que está haciendo el Chelsea que solo ha podido ganar cuatro puntos de quince posibles. Lejos están del buen fútbol que mostraron la pasada campaña. No son capaces de controlar y marcar el ritmo de los partidos y además la defensa es un verdadero desastre. Con doce goles son el equipo más goleado hasta el momento en la Premier League. La baja de Courtois es muy significativa, pero no deben utilizarla como excusa ya que la zaga en general transmite mucha inseguridad y desorden.
Antes de empezar el curso, los ‘blues’ eran favoritos para hacerse con el título liguero o por lo menos luchar por ello, pero los malos resultados que están cosechando les alejan de la posibilidad de ser de nuevo campeones. Con tres derrotas, un empate y una victoria están dos puntos por encima del descenso en decimoséptimo lugar. Además están once puntos por debajo del Manchester City que está intratable y que lidera la clasificación. Mourinho no es capaz de encajar todas las piezas, lo que le ha llevado a firmar el peor arranque de campeonato de los últimos 29 años y el peor en toda su carrera. No obstante, el portugués no ve peligrar su puesto tal y como han especulado algunos medios ingleses. «Soy el hombre adecuado para este trabajo. Hice muchas cosas buenas para el Chelsea y no me siento deprimido» afirma ‘The Special One’.
Mou es sabedor de la mala racha que atraviesa su equipo, pero esta vez no achaca el penoso rendimiento a sus jugadores. «Los resultados son malos, muy malos para nuestra calidad y la condición de los jugadores. Los jugadores se merecen más puntos de los que están recibiendo. Es fácil criticarnos, pero no estoy de acuerdo con la crítica» añade Mou. Pero hay algo muy inquietante y que también puede ser un motivo del malísimo comienzo. Mourinho carga consigo una maldición. Es la maldición de la tercera temporada. El luso no logró ningún título en su tercera temporada en el Real Madrid. Y precisamente, al comienzo de la temporada 2007-08, tras un arranque no demasiado bueno y una discusión con Roman Abramovich abandonó el Chelsea en la que era su tercera temporada.
Pensando ya en lo que está por venir, este miércoles tiene ante sí una gran oportunidad de calmar los ánimos en el primer partido de Champions League en el que se enfrentan al Maccabi Tel Aviv en casa. El conjunto londinense estará bajo la atenta mirada de sus seguidores y por supuesto de la crítica. Veremos si el enfrentamiento del próximo miércoles es el final de lo que está siendo un inicio de temporada catastrófico y elimina momentáneamente la posibilidad de que la maldición de la tercera temporada se repita.