Champions femenina: Por qué el Barça golea y el Atlético es goleado

Muchos se preguntarán cómo es posible que el Fútbol Club Barcelona Femení y el Atlético de Madrid femenino logren pasearse por la Liga Iberdrola prácticamente a su antojo (con cuatro jornadas disputadas, ambos colideran la clasificación con pleno de triunfos y suman goleadas escandalosas) y en cambio, en Europa, hayan vivido una experiencia radicalmente opuesta. Lo explicamos.

Los coeficientes. La Champions Femenina consiste en una fase previa formada por hasta diez grupos de cuatro. Solo los primeros y el mejor de los segundos acceden a dieciseisavos, donde ya se han clasificado de forma directa los mejores equipos de las grandes ligas (como Atlético y Barça, primero y segundo respectivamente en Liga Iberdrola). En esta ronda, el coeficiente de cada club es determinante para saber quién es cabeza de serie y quién no. Las rojiblancas, que solo habían disputado una edición de la Liga de Campeones hasta la fecha, cuentan con un coeficiente muy bajo (tiene 22 equipos por delante), por lo que su cruce sería ante un rival mucho más fuerte.

Este sistema, erradicado por la UEFA en la Champions masculina para favorecer a los campeones de sus respectivas ligas, no tuvo su réplica en la femenina, perjudicando a un Atlético que tuvo muy mala suerte: Se enfrentaría al segundo mejor equipo de Europa, el Wolfsburgo (más de 100.000 puntos por encima). El Barça, por su parte, se vería las caras con el Avaldsnes noruego, con el cuarto peor coeficiente de los 32 participantes.

Sobre el césped. Es el Wolfsburgo un rival temible. Campeón de la Champions en 2013 y 2014, vigente campeón de la Bundesliga y actual líder de la competición tras sumar cuatro triunfos en cuatro partidos (con 16 goles a favor y ninguno en contra), cuenta con una inversión mayor de capital y en su plantilla figuran algunas de las mejores jugadoras del mundo, entre ellas una Pernille Harder (subcampeona de Europa con Dinamarca) que se encargó de sentenciar la eliminatoria anotando el primer gol y forzando el segundo.

El Atlético, pese a la que le podía caer encima, compitió de forma espectacular en la primera parte e incluso pudo adelantarse en más de una ocasión. Perdonó y acusó la diferencia de físico respecto a las alemanas, habituadas a jugar a un ritmo más elevado en una competición con más del doble de puntos de coeficiente UEFA. La Liga Iberdrola crece, es la quinta de Europa, pero todavía está lejos de Francia, Suecia o Alemania.

Diferentes objetivos. «Su objetivo es volver a ganar la Champions, y nosotras no podemos tener ese objetivo, a día de hoy», decía alto y claro Silvia Meseguer en sala de prensa. El Wolfsburg no pasó de cuartos de final la temporada pasada porque se enfrentó a un Olympique de Lyon que encadena dos tripletes consecutivos en los dos últimos años. El cuadro alemán persigue el cetro europeo y es uno de los máximos candidatos a conquistarlo.

????⚽️ El gol de @LiekeMartens1 contra Avaldsnes #FCBFemeni #UWCL pic.twitter.com/XdeKVHe562

— FCB Femení (@FCBfemeni) 5 de octubre de 2017

Ahí entra el Barça en escena. Semifinalista en la pasada edición logrando el mejor resultado de su historia, la derrota frente al PSG, a quien no pudo siquiera hacer un rasguño (1-5 global) marcó un punto de inflexión. Incluso Jennifer Hermoso, la máxima goleadora de la Liga Iberdrola durante dos años consecutivos decidió marcharse al equipo parisino. La respuesta de la entidad azulgrana fue lo más ambiciosa posible. Lieke Martens, MVP de la Eurocopa y candidata al Balón de Oro de la FIFA, lidera un proyecto formado por internacionales con experiencia en los mejores clubes del continente (Duggan, Bussaglia, Andonova, Fabiana) con la base en un tercio de la selección española, contando a Mapi León (ex Atlético) como el primer traspaso de la historia de la Primera División en España. La victoria por 0-4 ante el Avaldsnes (rival muy inferior, eso sí), no es casualidad. El objetivo de las de Fran Sánchez pasa por ganar la primera Champions.