Por estos días, a los aficionados del Bayern Múnich se les podría dar un consejo: que no miren el historial del técnico Carlo Ancelotti en otros clubes.
En el Parma, el italiano fue despedido en su segunda temporada, lo mismo que en la Juventus. El Chelsea, ya en la Premier League, también lo despidió tras dos temporadas. Del Paris Saint-Germain se fue igualmente tras dos años, para llegar al Real Madrid, equipo que dejó, claro, después de dos campañas.
Solo rompen la tendencia su corto paso por el Reggiana y su larga estadía en el Milan. En su segunda temporada a cargo del cuadro bávaro, la particular «maldición» se comprobará o, por el contrario, el italiano saldrá airoso.
En el papel, el Bayern no debe tener ningún problema para ganar la Bundesliga por sexta vez consecutiva. Ahora bien, ¿bastará el título local?
En rigor, coronarse en la Liga de Campeones es lo que realmente quieren en el club bávaro. Otro fracaso en el torneo continental -la temporada pasada el equipo perdió en cuartos- podría costarle el puesto a Ancelotti.
El estratega perdió la calma y la experiencia de dos jugadores como Philipp Lahm y Xabi Alonso, ya retirados. A pesar de los fichajes, ninguna de las incorporaciones del campeón alemán tiene los galones del alemán y del español.
Sebastian Rudy y Niklas Suele llegaron del Hoffenheim, mientras que Corentin Tolisso arribó tras un traspaso récord desde el Olympique Lyon. Pero el volante francés apenas tiene un partido con la selección gala.
El colombiano James Rodríguez, por su parte, se incorporó a préstamo del Real Madrid. Queda por saber si puede adaptarse a la dureza de la Bundesliga. Por lo pronto, no estará en el debut del equipo por lesión.
El ex arquero Oliver Kahn, una de las glorias del Bayern, criticó al conjunto bávaro por no gastar más, en un mercado en el que el brasileño Neymar llegó al Paris Saint-Germain por 222 millones de euros (261 millones de dólares).
«Si el Bayern quiere estar entre los tres, cuatro primeros equipos de Europa, no hay manera de que puedan evitar hacer estos grandes fichajes», dijo Kahn a la revista «Kicker».
Pero Karl-Heinz Rummenigge, presidente de la junta directiva del equipo, rechaza la idea. «No queremos hacer eso, no podemos actuar de cualquier manera».
El brasileño Douglas Costa se fue a la Juventus y dejó en las bandas una delicada situación vista la edad y las frecuentes lesiones del holandés Arjen Robben (33) y del francés Franck Ribery (34). Más joven, el también francés Kingsley Coman no termina de consolidarse.
Asimismo, Serge Gnabry llegó del Werder Bremen pero fue cedido a préstamo casi inmediatamente al Hoffenheim, a pesar de ser un extremo con capacidad para jugar en posiciones ofensivas.
Después de los problemas de Thomas Müller la temporada pasada, los aficionados estaban convencidos de que el club compraría a un reemplazo para el delantero Robert Lewandowski, pero hasta ahora eso no ocurrió.
Si el polaco sufriera una lesión el viernes en el estreno liguero ante el Bayer Leverkusen, o después de que cerrara el mercado de pases, el Bayern estaría en serios problemas.
Por otro lado, los de Ancelotti tuvieron una mala pretemporada pero al menos ganaron la Supercopa alemana en penales ante el Borussia Dortmund y se impusieron 5-0 al débil Chemnitz, de la tercera división, en la primera ronda de la Copa alemana.
«He visto un buen despliegue de mi equipo, mostraron el espíritu y la actitud correcta», dijo el italiano.
Eso tendrán que seguir mostrando durante toda la temporada si quieren competir por el más importante torneo de clubes en el mundo. Y si, además, quieren demostrarle a Ancelotti que las segundas temporadas no necesariamente conducen a un despido.
You must be logged in to post a comment Login