No hay mejor regalo para un delantero que marcar goles para su equipo. Es esto lo que ha hecho Felipe Caicedo en la última semana para el RCD Espanyol. Siete días inspirados que bien podrían definirse como mágicos para el jugador blanquiazul. Sumergido bajo las sombras del banquillo, el atacante ecuatoriano salió al césped para convertirse en el héroe del equipo que dirige Sergio González, que ha vuelto a sonreír gracias sus tres goles en cuatro días.
Fue Caicedo el que firmó los dos goles ante el Valencia que supusieron la eliminación del equipo ‘ché’ de la Copa del Rey. El ecuatoriano salió a tiempo para reconciliar al conjunto perico con la competición del K.O y meterlo en cuartos de final (se medirán al Sevilla). Fue el hombre de la noche, con dos tantos en los últimos minutos del encuentro que acabaron con todas las esperanzas de los valencianistas. Por sorpresa, el Espanyol se impuso al poderoso Valencia de Nuno, aquél que una semana antes había sido el equipo que había acabado con la racha de victorias consecutivas que sumaba el Real Madrid. Y todo gracias a Caicedo, ex-jugador del City y el Levante entre otros.
Pero la heroicidad del delantero ecuatoriano no acabaría aquí. Tocaba partido de Liga ante un Celta de Vigo que continuó mostrando su peor versión. Pasaban los minutos en el Power8 Stadium y los goles no llegaban para ninguno de los dos conjuntos. Pero Caicedo volvió a reaparecer a tiempo con el único objetivo de acabar de la mejor manera una semana que pretendía ser perfecta, y que acabo siéndolo. El delantero del Espanyol volvió a repetir la hazaña, salió al terreno de juego para marcar y regalar a su equipo los valiosos tres puntos de la victoria.
Caicedo ha sido el hombre del Espanyol. Aquel que ha salvado al equipo en sus citas más importantes y sobre el que ahora posa todas sus esperanzas. Los tres puntos ante el Celta sirven para hacer respirar al equipo en Liga y alejarle de los comprometidos puestos de descenso, además de ser una inyección de optimismo de cara al complicado encuentro ante el Sevilla en los cuartos de final de Copa del Rey.