Con esas palabras comienza una de las sevillanas más ilustres que existen y no se me ocurre una frase que pueda definir mejor el momento de la temporada en el que nos encontramos. La Liga, la Premier League, la Eredivisie y la Bundesliga ya han terminado, mientras que la Serie A y la Ligue 1 lo hacen esta semana, por lo que llega el final de la temporada para las grandes ligas europeas. Esto significa que hay muchos jugadores que se despiden de sus clubes, de aquellos que les convirtieron en leyenda, pero también hay otros que dejan de jugar al fútbol. Este último grupo es el que nos hace recapacitar y darnos cuenta de lo rápido que pasa el tiempo.
En las siguientes líneas se hablará de dos tipos de jugadores diferentes, aquellos que dejan su club después de muchos años en él y aquellos que dejan de forma definitiva la práctica del fútbol. Si nos centramos en el primero de ellos observaremos a jugadores que son auténticas leyendas de los clubes que dejan. En Múnich nos encontramos con tres casos muy claros. Robben, Ribéry y Rafinha se marchan del Bayern para emprender nuevas aventuras profesionales. Los dos primeros han sido dos de los extremos más dominantes del fútbol europeo en la última década, y lo que le han dado al club alemán ha sido mayúsculo. Diferente es el caso de Rafinha, un futbolista que siempre ha sido regular y a quien podríamos considerar un hombre de club.
Viajamos a la parte rojiblanca de Madrid para encontrarnos con dos jugadores que ya son leyenda del Atlético de Madrid. Godín y Juanfran se han despedido de maneras diferentes de la afición colchonera, pero su legado en el club es indiscutible. La importancia de ambos desde la llegada de Simeone al Atlético ha sido capital y ambos se despiden como auténticos referentes para los hinchas. Otro referente que deja su club, en este caso su único club hasta el momento, es Daniele De Rossi. El italiano dice adiós al equipo del que primero fue hincha, luego futbolista y más tarde leyenda, la Roma. El centrocampista deja un hueco tremendo en el centro del campo romanista y un hueco todavía más grande en el corazón de toda la afición romana.
Diferente, aunque también dolorosa, es la marcha de Kompany del Manchester City. El central belga ha sido uno de los hombres más importantes en la historia reciente del campeón inglés. Todos los aficionados del City recordarán eternamente el gol del belga frente al Leicester que hizo campeones a los cityzens. También en Manchester, Antonio Valencia dejará un hueco muy importante en la parte roja de la ciudad. Sin salir de Inglaterra nos encontramos con el caso de Gary Cahill, quien se puede despedir del Chelsea con un título europeo.
Cambiando de grupo nos vamos a encontrar con jugadores que han marcado una época en el fútbol continental y que van a dejar un vacío insustituible. Empezamos por la portería, donde Petr Cech deja un hueco enorme, sobre todo para aquellos que alguna vez nos hemos puesto bajo los palos y admiramos sobremanera al guardameta checo. Cech ha sido uno de los mejores porteros de los últimos 15 años, y tendrá la oportunidad de despedirse del fútbol levantando la Europa League el próximo miércoles.
Continuando por líneas llegamos a Andrea Barzagli. El central italiano jugará su último partido con la Juventus este fin de semana. Barzagli formó junto a Bonucci y Chiellini una de las defensas más poderosas que hemos visto en la última década en el fútbol europeo. Llegó en 2011 a la Juventus y desde entonces ha sido fundamental para los éxitos de la escuadra italiana. Nos saltamos el centro del campo y llegamos a la delantera, donde Robin van Persie ha dejado de hacer lo que mejor se le daba, marcar goles. Sus mejores años los pasó en el Arsenal después de su fulgurante debut con el equipo de la ciudad, el Feyenoord. Precisamente allí, en Rotterdam, es donde el delantero holandés se ha retirado, rodeado de los suyos, de esa afición que siempre le ha idolatrado.
Damos un paso atrás para cerrar con el centro del campo. En esa posición es donde se desempeñaban los dos últimos protagonistas. Borja Fernández dijo adiós al fútbol el pasado sábado en el partido que enfrentó a su Valladolid con el Valencia. El gallego se despidió entre lágrimas de la afición que siempre le ha apoyado y que más partidos le ha visto jugar como profesional. Para mencionar y despedir como se merece al último nombre de la lista habría que ponerse en pie. Xavi Hernández, uno de los mejores futbolistas de la historia de España, se ha retirado. El centrocampista ha dejado la práctica del fútbol alejado de los muchísimos focos que habría tenido sobre él si hubiera hecho esto en el Barcelona. El reconocimiento y agradecimiento a Xavi siempre será eterno, ahora solo falta verle como entrenador, algo que, no nos engañemos, también apetece mucho.
Siempre es doloroso ver cómo jugadores que han sido tan importantes se marchan de un club del que son leyendas o cómo otros, también de gran importancia, deciden decir basta. La frase que da título a estas líneas no podía ser más adecuada para lo que en ellas se ocupa. Siempre es difícil decir adiós, pero es más difícil decírselo a alguien que ha sido tan importante para ti. Porque sí, es verdad, algo se muere en el alma, cuando un amigo se va.
You must be logged in to post a comment Login