El mercado de fichajes comienza a hervir. El periodo de traspasos en el mes de enero comienza a coger forma, y muchos son los nombres que empiezan a moverse, que empiezan a coger peso para cambiar de equipo, y otros tanto que empiezan a ser oficiales.
En Inglaterra saltaba la sorpresa, saltaba la liebre del mercado, y la noticia del día llegaba desde St. James’ Park. Uno de los técnicos más mediáticos de la Premier League tiene todas las papeletas de cambiar de aires.
Alan Pardew, parece, se convertirá en próximos días en nuevo entrenador del Crystal Palace. Un cambio inesperado, que ha dejado a muchos descolocados, y que ha generado todo tipo de comentarios sobre su marcha.
2014 ha sido un año complicado para el técnico inglés. Su andadura en el banquillo del Newcastle no le ha ofrecido las mejores sensaciones, y su estancia en St. James’ Park ha estado en el aire desde principio de temporada. Un mal inicio hizo que las Urracas se codearan con los siempre delicados puestos de descenso. Los resultados no llegaban, y las críticas se apropiaron de su nombre, llegando incluso a niveles descontrolados.
Sin embargo, todo mejoró. En apenas semanas el Newcastle pasó de la zona caliente a puestos que le permitían tocar con la mano Europa. El cambio fue absoluto. Alan Pardew había sacado adelante una situación totalmente adversa, tanto a nivel personal como deportivo, pero ahora, tras la última jornada liguera en 2014, todo parece indicar que hay volantazo, que hay cambios, y que Pardew dejará el club.
Todo parecía haber mejorado. Todo parecía haber tranquilizado el infierno contra Pardew, pero todo era fachada, todo era estética. El entrenador inglés, parece, dejará el Newcastle con destino Crystal Palace, pero, ¿cuáles son las causas que provocan su marcha?
Relación con la afición del Newcastle.
Alan Pardew ha sido objetivo claro de la ira de los aficionados del club. Una relación tensa, que dejó imágenes incluso desagradables al principio de temporada, cuando las bromas, burlas y quejas de los fans del Newcastle eran directas, sin maquillajes, contra el entrenador. Cuando sonaba su nombre por megafonía, cuando salía al campo. En casa, como visitantes. Siempre. Una tensión que tiempo después, como suele pasar en el fútbol, se relajó cuando el equipo mejoró notablemente con Pardew en el banquillo. Ya nadie recordaba la injusticia contra su persona. Él había sacado al equipo del pozo, lo había sacado adelante. Parece, él no olvida toda esa época desagradable de principio de temporada.
Fue jugador del Crystal Palace
Alan Pardew conoce al que sería su nuevo club. Durante la etapa 1987–1991 defendió los colores de los Eagles, disputando un total de 128 partidos y marcando 8 goles. Es decir, va a un club donde conocerá el entorno, lo que pide la afición. No se va a la aventura, como pueda parecer en un primer momento.
Cambia Newcastle upon Tyne por Londres.
Una de las preguntas fáciles y concretas que surgen con su hipotética llegada a Selhurst Park es, ¿mejora a nivel deportivo dejando el Newcastle por el Crystal Palace? A priori, dudas. Quizás no vaya a dar un salto rotundo en su carrera deportiva, pero llega a Londres, llega a la gran City. Londres ofrece todo tipo de menús, tanto a nivel cultural, de ocio, como de todo ámbito que se plantee en su cabeza. Otro nivel de vida, otra rutina, y llegaría a un club donde ya militó como futbolista. Es decir, conoce la ciudad, y sabe que nada tiene que ver con Newcastle upon Tyne.
Suculento contrato económico.
No se iría al Crystal Palace de forma gratuíta. Está claro. Medios como Daily Star aseguran que su contrato en Londres rondaría los 10 millones de libras. Sin duda, un movimiento donde, parece, el dinero tiene mucho que ver, y es por ello que está recibiendo críticas al plantearse la hipótesis de que «se vende» por dinero. El equitativo reparto televisivo de la Premier League permite a equipos como el Palace ofrecer y gestionar contratos de este calibre. Todavía no son oficiales las cifras, pero el salto económico de marcharse a Londres sería notable.
Y ahora, desconcierto. Medios de comunicación ya hablan de Coloccini, capitán y jugador del Newcastle, como sustituto para el banquillo, ejerciendo de técnico y futbolista, parece, al mismo tiempo. Una decisión que ido cogiendo fuerza con los días, y que parece que tendrá final verídico. Pardew dejaría el Newcastle cuando nadie lo esperaba, en mitad de la temporada, y para coger las riendas de un club que, deportivamente, no supone a priori un salto de calidad para el entrenador inglés, ya que están en descenso actualmente.