Hubo sorpresa en el grupo H del Mundial. Pese a la victoria (0-2) de Uruguay sobre Ghana, los charrúas se despidieron de la Copa del Mundo. Los de Diego Alonso tenían controlado el partido, pero no el pase a octavos.
Uruguay necesitaba ganar para clasificarse, y así lo hicieron. Sin embargo, un gol que adelantaba a los coreanos frente a los portugueses dejó el grupo patas arriba. La recta final del encuentro en el Al Janoub Stadium fue un completo caos. Si Uruguay marcaba el tercero, pasaban a octavos de final, pero si Ghana empataba el partido, eran ellos los que se clasificaban. Pero no pasó ni una cosa, ni la otra. El partido concluyó 0-2 y la selección de Corea del Sur se clasificó por haber marcado más goles.
El partido empezaba que ni pintado para Las Estrellas Negras. En el minuto 16, el VAR concedió un penalti para los africanos. Doce años después, los ghaneses podían cobrar su venganza, pero no fue así. André Ayew, el único jugador del conjunto africano que estuvo en aquel partido de cuartos de final del Mundial de 2010 fue el encargado de chutar el penalti. Por suerte o por desgracia, Sergio Rochet adivinó la trayectoria del balón y paró el disparo del delantero del Al-Sadd. La maldición seguía para los ghaneses.
Uruguay comenzó a atacar. Darwin Núñez tuvo una muy clara que sacó Mohammed Salisu prácticamente desde dentro de la portería, pero el gol charrúa no iba a tardar en llegar, porque tres minutos después, Giorgian de Arrascaeta ponía el primero en el luminoso tras un rechace de Ati-Zigi a un disparo de Luis Suárez.
Cinco minutos después, los mismos protagonistas del primer gol se encargaron de marcar el segundo. De Arrascaeta volvía a marcar y ponía el 0-2 después de una buena volea al centro de Suárez.
La segunda mitad comenzó con una acción polémica. El VAR llamó al colegiado del encuentro para que chequeara un posible penalti para los uruguayos, pero el árbitro del partido se mantuvo firme con su decisión y no pitó la pena máxima.
Se avecinaba tormenta y nadie lo sabía. El conjunto charrúa especuló con el marcador. Se mostraron confiados con el resultado, pues con el empate a uno en el partido de Corea del Sur y Portugal los uruguayos pasaban de ronda. Pero en el minuto 86, el banquillo de Uruguay se hizo eco de una mala noticia: los surcoreanos habían marcado y esto los dejaba fuera de octavos. La cara de Luis Suárez era un poema. Al borde de la lágrima, no podía creer lo que estaba pasando.
A partir de aquí, el partido fue una ida y venida de acciones por parte de los dos combinados, pero que no tuvieron trascendencia en el resultado final. El partido terminó 0-2, de modo que uruguayos y ghaneses se quedaron fuera de la competición.
De este modo, Uruguay despide a toda una generación de futbolistas. Probablemente, jugadores como Luis Suárez, Edinson Cavani y Diego Godín no vuelvan a vestir la celeste en una Copa del Mundo.
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