A escasos días de que comience una nueva e ilusionante temporada en La Liga española y de que el siempre agitado mercado de fichajes estival concluya, los equipos de Primera División van ultimando la confección de sus plantillas intentando pescar futbolistas en los mejores escenarios posibles.
Pese a que la escala de jerarquía en la máxima categoría Calcio no ha variado en los últimos cinco años, la Serie A sigue creciendo en cuanto a número de talentos interesantes y exportables y se ha asentado en este prólogo veraniego de La Liga 2016/17 como el campeonato de origen, a excepción obvia del propio campeonato español, de donde proceden la mayoría de los fichajes que llegan a los veinte equipos que la integran.
Una tendencia ascendente que se debe, en buena parte, al gran nivel competitivo que entrevera la Serie A, a los pulidos aspectos tácticos que permiten elevar los rendimientos de los jugadores que han pasado por el Calcio y también a la pérdida de poder económico a la hora de acometer traspasos o abonar sueldos con respecto a La Liga y a la Premier League, especialmente. Motivos que provocan que en Italia se hallen varias gangas preparadas para la máxima exigencia.
Krsticic (Alavés), Vrsaljko (Atlético), Sanabria (Betis), Roncaglia (Celta), Guilherme (Dépor), Gabriel Silva y Ponce (Granada), Kevin-Prince Boateng (Las Palmas) tras quedar libre en el Milan, Brignoli y el pase definitivo también desde la Juventus de Gabriel Pires (Leganés), Jaime Romero (Osasuna), Morata (Madrid), Joaquín Correa y Franco Vázquez (Sevilla) y Nicola Sansone y Roberto Soriano (Villarreal). Un proyecto, este último, que ha cogido un aroma muy italiano durante este verano y que sirve como paradigma.
Son dieciséis en total los jugadores que han recalado hasta ahora en La Liga procedentes de clubes italianos, siendo esta cifra casi un 30% de todas las incorporaciones realizadas en Primera División desde campeonatos ligueros foráneos. Aunque sumando a aquellos cuya última experiencia fue en la Serie A pese a que no contasen en Italia con sus derechos, el número asciende a veinte e incluye a Livaja en Las Palmas tras pasar por Empoli cedido por el Rubin, a Kuzmanovic en Málaga prestado por el Basilea tras hacer lo mismo en Udine, a Duje Cop en el Sporting desde Málaga pero cedido por el Cagliari y a Lucas Digne en el FC Barcelona, vendido por el PSG tras un año en Roma.
De este modo, la Serie A sigue confirmándose como el campeonato idílico para pescar jugadores, por encima de los doce cuyos derechos pertenecían a la Premier League, aunque solamente Carles Gil (Dépor), Juanmi (Real Sociedad), Demichelis y Jurado (Espanyol) eran miembros de pleno derecho de las plantillas de la élite inglesa el año pasado.
El buen precio, buen nivel y capacidad de ofrecer un buen rendimiento que poseen los futbolistas que dejan la Serie A para llegar a La Liga es una circunstancia que los equipos de españoles parecen haber constatado este verano. Y la lista aún podría ampliarse (Diego López y Suso > Celta / Diawara > Valencia). El mercado italiano está de moda en La Liga y la inmejorable relación calidad-precio lo justifica con creces.