El 1 de octubre de 1975 se paró el mundo durante una hora. En la noche norteamericana, a las 10:45 en Filipinas, se disputaba en Quezón, entonces capital filipina, en la región metropolitana de Manila, el que es considerado uno de los mayores eventos deportivos de toda la historia. Fue llamado Thrilla in Manila.
En combate de boxeo se enfrentaron dos de los mejores púgiles de los años ’70 y de la historia de este deporte. Por tercera vez, frente a frente, Muhammad Ali y Joe Frazier, en un combate disputado en condiciones extremas (más de 45 grados de temperatura) y que supuso el fin de la carrera de Frazier y el último momento álgido de Ali.
Tras 14 rondas de intercambio constante de golpes, movimientos, técnicas y estilo, Frazier, prácticamente ciego de un ojo, fue derrotado por KO técnico por un Ali que también estaba absolutamente agotado. «Es lo más cerca que he estado más cerca de la muerte», declaró después Ali.
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