Nació en Francia y es delantero del Arsenal, pero no es Thierry Henry. Todo delantero que llega al Norte de Londres para enfundarse la camiseta del conjunto Gunner tiene sobre sí la presión de un equipo prestigioso por su historia en Inglaterra, y por ser uno de los clubes europeos más populares a nivel mundial.
Sin embargo, la sombra del eterno Henry sigue sobrevolando el Emirates Stadium. Hacer olvidar a una leyenda es, quizás, una de las tareas más complicadas en el mundo del fútbol. Sin llegar a sus cifras, sin crear el revuelo mediático de Thierry, Olivier Giroud sigue ganándose el cariño de la afición del Arsenal.
El pasado verano llegaban al equipo jugadores ofensivos como Alexis Sánchez, que se ha desatado como el gran goleador del equipo, y Danny Welbeck, quien llegaba procedente de Old Trafford. Tras varios meses sonando jugadores de la talla mundial como Cavani, finalmente, los aficionados del Arsenal se quedaron sin esa estrella mediática que esperaban y deseaban.
Pero ahí seguiría Olivier, en silencio, en un segundo plano mediático respecto a otros delanteros de carácter mundial. Tendría competencia en el aspecto ofensivo, tendría más trabajo para seguir contando con la confianza del técnico, también francés, Arsène Wenger.
El Middlesbrough llegaba al Emirates Stadium para disputar la ronda de Octavos de Final, tras firmar una de las grandes sorpresas en la anterior ronda, cuando dejaba fuera del campeonato copero al Manchester City, ganando en el Etihad. Evidentemente, el conjunto de Karanka adquiría flashes mediáticos con su llegada a la capital londinense con una hipotética clasificación, de nuevo, ante un equipo Premier.
El encuentro fue de dominio local casi desde el primer minuto. Un monólogo cuya voz goleadora tuvo, ante el gran coliseo Gunner, la figura de Olivier Giroud, quien rompería el cerocerismo del luminoso, quien aportaría una brecha importante en el marcador, y quien se convertiría en el gran héroe local en el triunfo 2-0 del Arsenal, con dos goles del delantero francés.
El jugador más sexy del fútbol inglés, o eso dice un premio a modo popular que ha recibido de forma esporádica recientemente, fue el encargado de romper el partido antes del descanso, cuando el Arsenal se fue a la pausa hacia el túnel de vestuarios con el 2-0 definitivo ya a su favor. Giroud lograba un nuevo doblete que le permite seguir siendo uno de los grandes protagonistas en ataque para el conjunto Gunner.
Comenzó de forma rotunda el campeonato, compartiendo protagonismo con Alexis Sánchez. Comenzó con una buena racha goleadora, pero una grave lesión le impidió estar a disposición del técnico en torno a 3 meses. Sin embargo, volvió, y lo hizo de la mejor de las maneras, casi sin notar el acentuado parón.
Un futbolista que a nivel mediático, tanto a nivel inglés como europeo, no acaba de conseguir el escalón mediático de otros como Rooney, Ibrahimovic o Tévez, dejando de lado a los estratosféricos Messi y Cristiano. Quizás esta sea una de sus ventajas. Partiendo desde la sombra, donde los flashes son menores para su figura, es donde puede rendir mejor, donde siente una menor presión (pese a ser uno de los máximos goleadores del equipo y jugando Champions League) y donde puede desenvolverse de la mejor de las formas.
Giroud suma hasta la fecha 10 goles entre todos los campeonatos. Teniendo en cuenta que se ha perdido cerca de 3 meses de competición, con cerca de 5 meses en juego, sus cifras adquieren relevancia, le siguen permitiendo ser uno de los grandes referentes ofensivos del equipo.
Frente al Middlesbrough, en FA Cup, volvió a ser determinante, volvió a marcar un doblete para los suyos, dejando claro que su olfato goleador sigue intacto.