El partido de Copa del Rey ante el Huesca era la gran oportunidad para el nuevo jugador del FC Barcelona: Douglas. Luis Enrique dejó en el banquillo a Montoya, dando minutos al jugador brasileño que aún no ha tenido gran protagonismo con el equipo. Ocupó el lateral derecho con muchas dudas, perdió balones y no estuvo acertado ni en materia ofensiva ni defensiva. Una mala noche para el nuevo defensa del conjunto azulgrana, que no estuvo a la altura.
De esta forma, se plantea un nuevo problema para Luis Enrique, y para el FC Barcelona en general. El puesto de lateral derecho no está bien cubierto. Un problema que se agranda tras saber que a Martín Montoya se le ha acabado la paciencia y no soporta el hecho de estar sentado en el banquillo jornada tras jornada. Una situación que podría hacer peligrar el futuro del jugador que, según las últimas informaciones, ya habría pedido a su representante la salida del club culé. Una sugerencia que tendrá que meditar muy bien la directiva azulgrana, a la espera de que se pronuncie el TAS y saber si, finalmente, podrá fichar o no las dos próximas campañas.
Con ello, las opciones de Luis Enrique se reducen. Douglas, en pleno proceso de adaptación, aún no funciona con el grupo, mientras que Montoya parece ser la cuarta opción del técnico asturiano. Así pues, quedan dos caminos a escoger para cubrir la posición de lateral derecho: el lesionado Dani Alves y Adriano, que apunta a ser el sustituto del brasileño la próxima semana ante el PSG.