El Real Madrid afronta una temporada de altibajos en la Euroliga 2024-25, con un inicio de campaña que no ha cumplido las altas expectativas. A pesar de contar con una plantilla plagada de estrellas, el equipo ha mostrado signos de inconsistencia en sus desplazamientos. La reciente derrota ante el Anadolu Efes (64-74), la sexta acumulada en la competición y la primera en casa en la presente temporada, evidenció muchas de las carencias que deben corregir si quieren seguir siendo candidatos al título europeo.
El encuentro contra el Efes fue una dura prueba para los de Chus Mateo, que no pudieron contener el ataque del campeón de 2021. A pesar de un buen comienzo, el Real Madrid se desmoronó y llegó a ponerse 27 puntos por debajo del rival. A pesar de los intentos de remontada en los últimos minutos, la falta de precisión ofensiva y las dificultades defensivas acabaron pasando factura. En las estadísticas, Campazzo fue el mejor discurso de los blancos.
Uno de los puntos débiles más evidentes es su falta de solidez defensiva. A pesar de contar con un jugador clave como Tavares en la pintura, los blancos han mostrado vulnerabilidades, especialmente en el rebote y en la protección del aro, que deben corregir urgentemente.
A pesar de este revés, el Real Madrid sigue siendo un equipo con gran potencial. Con tiempo para ajustar su juego y recuperar a sus piezas clave, como Poirier, el equipo de Chus Mateo tiene la capacidad de corregir estos errores y retomar el rumbo hacia los primeros puestos de la clasificación. La temporada es larga y, aunque este tropiezo fue doloroso, aún hay margen para la recuperación.