El Manchester United tiene un nuevo líder. Marcus Rashford se está erigiendo como el futbolista referencia del conjunto de Erik Ten Hag. El inglés, aparte de haber mostrado su liderazgo fuera del terreno de juego con sus obras caritativas, consiguiendo ser nombrado Miembro de la Orden del Imperio Británico en 2020. También parece haber alcanzado la madurez futbolística para ser el estandarte del conjunto red debil.
Desde su debut en el año 2016, Rashford siempre ha mostrado ser un jugador especial. El británico de ascendencia sancristobaleña tuvo un inicio de carrera fulgurante, batiendo récords de precocidad goleadora tanto en su club, como en la selección inglesa.
Sin embargo, tras unos años de inestabilidad a nivel individual del propio futbolista, como del conjunto de Mánchester, el n.10 está consiguiendo mostrar el nivel que todo el mundo esperaba de él en el club de su vida.
Gran parte de este excelso rendimiento mostrado por Rashford es gracias a su nuevo técnico. La llegada de Erik Ten Hag ha supuesto un soplo de aire fresco al conjunto inglés. El entrenador neerlandés está construyendo un equipo armónico, y con la capacidad de generar contextos idóneos para que el delantero pueda mostrar muchas de sus cualidades.
El futbolista siempre ha jugado el cualquiera de las tres demarcaciones del frente del ataque. Sin embargo, la presente temporada se ha consolidado como la principal referencia ofensiva de su equipo.
A través de la demarcación de delantero, Marcus está mostrando todas sus cualidades. Además de su versatilidad posicional, el atacante también posee unas capacidades condicionales, coordinativas, y cognitivas excelentes.
Uno de los aspectos más destacados es su velocidad de desplazamiento. En situaciones de ventaja espacial (circunstancia habitual en la Premier League), el futbolista es determinante e inalcanzable para el rival. Asimismo, otro de los rasgos destacables es su habilidad técnica. Gracias a ella, el jugador puede encarar al defensor y salir para cualquier de los dos perfiles.
Por último, uno de los mayores puntos de mejora mostrados durante la presente temporada, es su capacidad cognitiva. Este factor se ve reflejado en la aplicación de diferentes fundamentos, pudiendo ser estos individuales, de línea o universales.
El primer de ellos, y que a su vez va estrechamente relacionado con su nueva demarcación y capacidad coordinativa, es la ejecución del FID “rematar hacia abajo”. Rashford nunca ha sido un especialista de cara portería rival. Sin embargo, su determinación ha aumentado considerablemente.
Desde el mundial de Qatar 2022, el delantero ha logrado un total de 16 goles a pesar de tener un 8.65 xG de tantos esperados, es decir, dobla el número de tantos que debería llevar.
Otro de los comportamientos tácticos que más y mejor está realizando este curso, es el fundamento de línea de “desmarque en profundidad al espacio interior delante un desequilibrio espacial en la línea defensiva”. Marcus ha incrementado su capacidad perceptiva, consiguiendo analizar de una forma más óptima lo que ocurre a su alrededor. Gracias a ello, el futbolista identifica los desequilibrios defensivos en el equipo rival, para así atacarlos y poder ubicarse en situaciones de ventaja.
En conclusión, la evolución paulatina durante estos últimos años, y en especial el presente curso, ha catapultado a Marcus Rashford a ser uno de los mejores futbolistas del mundo en estos momentos. Asimismo, su excelente rendimiento en del terreno de juego, sumado a su liderazgo dentro y fuera del campo, le han convertido en el estandarte del Manchester United.