Virginia Ruano (Madrid, 1973), cogió la dirección del Open Castilla y León Villa de El Espinar en 2011 tras ser nombrada por su fundador y presidente de honor, Pedro Muñoz. Entonces el torneo era de categoría $85.000+H. Hoy tiene categoría 90 y, desde 2016, también celebra un cuadro ITF Futures femenino que comenzó en categoría $10.000 y ahora es $25.000, promovido e impulsado por Virginia y Pedro.
Tras la suspensión obligada por la pandemia en 2020, el torneo solo disputó el cuadro Challenger en 2021. Este 2022 ya ha vuelvo con el pack completo: hombres y mujeres compitiendo y ellas desde el principio en El Espinar. Ha costado seis ediciones y siete años, pero el sueño completo se ha hecho realidad.
Tras acabar una de las jornadas de tenis, Virginia Ruano se sienta en la pista Pedro Muñoz con Sphera Sports para analizar el pasado, presente y futuro del Milagro del Espinar.
Pregunta: Suspensión por la pandemia en 2020, el cuadro Challenger en 2021 y Challenger e ITF femenino en 2022. ¿Cómo se afronta la 36ª edición?
Virginia Ruano: “Afrontamos 2022 con mucho trabajo y mucha alegría de tener otra vez a las chicas. Además, desde el principio aquí en las mismas instalaciones, con la construcción de dos nuevas pistas. Tenemos muchas ganas de seguir sumando y creciendo. La valoración es muy positiva, con buen nivel de juego y muchos jugadores. Hay ocasiones en que los cuadros previos Futures femeninos no se llenan, pero sí que se ha completado e incluso hay cuatro tenistas que se han quedado fuera. Para mí eso es que lo estamos haciendo bien y estamos ayudando a las jugadoras españolas”.
Pregunta: ¿Qué significa el poder recuperar el cuadro ITF femenino?
Virginia Ruano: “Lo dije el año pasado y me criticaron. Dije que no era no querer hacerlas, quería retomarlo, pero las instalaciones, por las circunstancias de la pandemia, no nos permitían tener tanta gente en un recinto tan pequeñito y que la tradición de los chicos, si perdía esa semana, igual no la podía recuperar. No era lo mismo que las chicas. No sé si me creyeron o no, pero era mi intención y lo he demostrado. Teníamos que construir esas dos pistas porque si no, no era factible tenerlas aquí. Lo hemos conseguido. Y aquí están. Pero tenemos que seguir creciendo porque esto sigue siendo un recinto chiquitito. Para querer crecer tanto con ellos como con ellas, tenemos que crecer como instalación”.
Pregunta: El cuadro femenino, un sueño hecho realidad hace siete años, consigue celebrarse desde el inicio en el Complejo Deportivo Pedro Muñoz. Sueño completo.
Virginia Ruano: “Meter el cuadro femenino en El Espinar desde el inicio ha costado cinco ediciones desde que comenzamos con esta ilusión, todavía en vida de Pedro. Era necesario, para mí era imprescindible. Se ha ido celebrando como se podía hacer: jugando fuera hasta cuartos y luego trayéndolas aquí. Fuimos acercando el torneo poco a poco, pero seguía sin ser jugar aquí. En la sexta edición lo hemos conseguido, desde la primera pelota. Intentando igualar en todo a ambos cuadros”.
Pregunta: ¿Qué le pide la directora del Espinar al futuro, mirando a 2023?
Virginia Ruano: “Al futuro le pido muchas cosas, pero por lo menos, conservar lo que tenemos. Le pido mejorar la infraestructura. Tener aquí a las chicas y también a los chicos contentos y sin quejas. Pero esto es pequeño. Le pido infraestructuras porque la ilusión y el trabajo están. Nos faltan medios y eso es lo que pido, tener medios para hacer un torneo mejor”.
Madrid. Periodista y CCMM. Redactor en @elcontragolpe_ Gestiono @ATPsphera Antes en @franquicianet portal de @t4franquicias Punto de Encuentro y EL MUNDO